No suele ser habitual escuchar a James Vowles con ese tono de preocupación tan alejado del aplomo que suele mostrar el jefe de estrategia. Los Mercedes-AMG F1 estaban en riesgo de no poder terminar el pasado Gran Premio de Austria y despedirse de lo que potencialmente parecía que iba a ser el primer doblete de la temporada. El abandono de Lance Stroll por un problema con los sensores y la fumata blanca en el Williams de George Russell demostraban que las mejoras en la Unidad de Potencia de los alemanes también podrían tener grietas.
Es por ello que, a los dos pilotos de Mercedes, en su lucha cerrada por la primera posición se les insistió en numerosas ocasiones que trataran de mantenerse dentro de los márgenes, que no apuraran fuera del piano para así no someter aun mayor castigo a la caja de cambios. Lo que aparentemente parecía ser una forma de zanjar la lucha fratricida, parece que finalmente iba muy en serio, temiendo los de Brackley que se produjera en cualquier momento un colapso que obligara a abandonar a uno de sus monoplazas, o incluso a los dos.
Ahora, la escudería dominadora de la era híbrida en la Fórmula 1 ha reconocido que se enfrentan a una situación compleja ya que deberán afrontar este GP de Estiria sin haber solventado por completo los problemas; en principio una interferencia eléctrica causada por las grandes vibraciones y compresiones que se viven en el Red Bull Ring, algo que a su vez parece que debería afectar a la sincronización de la caja de cambios hasta el punto de temer un fallo mecánico inmediato.
Todo lo que sabemos en este momento es que hay elementos eléctricos de las cajas de cambios que están sufriendo, y necesitamos hacer más para poder pasar por este Gran Premio. Y la realidad detrás de esto es que este es un problema que podría haberle costado a uno o ambos coches la oportunidad de terminar la carrera el domingo – James Vowles
Si bien esto no debería preocupar demasiado de cara a Silverstone, sí que hay circuitos como Hungría en los que la trazada ideal sigue obligando a tocar muchos pianos, por lo que el equipo deberá seguir trabajando en la solución.
Este problema fue causado por los vibradores agresivos de Spielberg. Primero notamos el problema el viernes e inmediatamente comenzamos a trabajar en cómo solucionar el problema para las próximas carreras, en la fábrica y en la pista. Traeremos nuevos componentes este fin de semana para mejorar la situación – Toto Wolff
Red Bull también con problemas eléctricos:
La situación para Red Bull Racing sin embargo es incluso más compleja. Son, junto a HAAS y Williams los únicos equipos que se fueron el pasado domingo de la carrera con un cero en su casillero después de haber perdido a los dos coches, uno con problemas al principio de carrera, cuando a Max Verstappen le entró el anti-stall al cambiar a un nuevo modo, y el otro, Alex Albon, que tuvo que decir adiós por la pérdida de potencia en su unidad después de ser el peor parado en el contacto con Lewis Hamilton.
Honda afirma que ambos problemas venían derivados de fallos eléctricos y que las unidades de potencia en han sido revisadas y se ha comprobado que están en buen estado. De esta forma no se espera que haya cambios e ninguno de los dos coches de Red Bull Racing.
Las preocupaciones encontradas en los coches de carreras Aston Martin Red Bull durante la última carrera fueron de origen eléctrico, pero las causas fueron diferentes. Analizamos esto junto con los equipos y hemos implementado contramedidas para este fin de semana – Toyoharu Tanabe