A mediados del pasado mes de abril os hablábamos de que este año se celebraban los 125 años de Mercedes-Benz en competición. El evento, celebrado en el Circuito de Silverstone llevó a que algunas viejas glorias del DTM, Turismos y Fórmula 1 se dieran cita sobre el asfalto de la pista británica en el inicio de unas exhibiciones que se seguirán desarrollando a lo largo del año. Ayer, 22 de julio era la fecha en que se conmemoraba precisamente el 125 aniversario de la primera carrera de automóviles, disputada entre París y Rouen en 1894 y en la que Daimler estuvo involucrada.
Da la casualidad en que esta misma semana se desarrollará en el Gran Premio de Alemania, siendo a su vez el 200 GP en el que Mercedes compite de forma oficial. No ha sido de extrañar que se haya anunciado una librea especial para los Mercedes AMG F1 W10 EQ Power+ en la cual se rememoran precisamente los primeros días de las Silver Arrows y cómo se llegó a ellas.
La decoración que emplearán los coches de Lewis Hamilton y Valtteri Bottas este fin de semana en Hockenheim precisamente recordará esa Eifelrennen, celebrada el 3 de junio de 1934 en Nürburgring en la que debutó el W 25. Aquella noche previa a la carrera, los comisarios comunicaban a los responsables del equipo Mercedes- Benz que el peso de sus vehículos se encontraba un kilogramo por encima del peso máximo por reglamento para el vehículo sin líquidos y ruedas.
La solución fue directamente la de retirar la pintura blanca que representaba a Alemania (los coches italianos llevaban la roja, los franceses el azul o los británicos la verde) para poder cumplir con las exigencias de peso. Durante aquella noche, los técnicos trabajaron a destajo para rascar por completo cada una de las carrocerías de aluminio y dejar a la vista el característico color plateado que daba durante años el sobrenombre a las flechas de Mercedes-Benz.
En los dos pequeños teasers mostrados por el equipo durante las últimas horas precisamente se deja entrever esa pintura blanca rascada para mostrar la imagen moderna de la estructura ganadora de los últimos cinco campeonatos del Mundo de Fórmula 1, incluido el patrón cromático de su socio y patrocinador, Petronas. Además, se sustituirá la estrella moderna por el logotipo antiguo, decorado por los tradicionales laureles.