Tras cubrir con Punta del Este el hueco dejado por Sao Paulo, Montreal acaba de crear un nuevo quebradero de cabeza al equipo de Alejandro Agag. La ciudad canadiense ha decidido pasar de la Fórmula E tras sólo una edición de su ePrix, que como en la temporada pasada debía ser una cita doble en la campaña 2017-2018 del certamen de monoplazas eléctricos. La nueva alcaldesa, Valérie Plante, lo confirmó este lunes.
Más que como una súbita pérdida de interés en la Fórmula E, este movimiento hay que leerlo en clave de política local. Las críticas de Plante a la opaca gestión del ePrix y la incomprensión de muchos ciudadanos por tener que montar un circuito urbano teniendo ya el Gilles Villeneuve en plena ciudad, un auténtico despilfarro para muchos, fueron pieza central de la campaña electoral que permitió a la política hacerse con la alcaldía de forma bastante inesperada. Y abrir los cajones de la sociedad promotora del evento fue la puntilla.
La permanencia en el calendario del ePrix de Montreal pasaba por convencer a los gestores de la Fórmula E de la conveniencia de organizar el evento en el trazado semiurbano sobre el río San Lorenzo, pero ello chocaba directamente con las directrices impuestas por la FIA: el organismo internacional ya advirtió a Alejandro Agag de que los circuitos urbanos debían seguir siendo la razón de ser de la Fórmula E, siendo México tan sólo una excepción.
Via | Montreal Gazette
