En un nuevo giro de los principios de la competición, NASCAR ha decidido cambiar más elementos para mejorar la acción en pista en 2017. La controvertida organización ha explicado en una rueda de prensa las principales modificaciones de cara a esta temporada. Las más destacadas incluyen la división de todas las carreras en tres segmentos (separados entre sí con periodos de caution), la introducción de puntos durante esos tres segmentos y un pequeño retoque al sistema de puntuación estándar una vez finalice la carrera. Los cambios de puntuación afectan a las tres categorías nacionales de NASCAR y provocan dos eliminaciones: la del polémico caution clock en la Truck Series y la del nombre «Chase» para hablar de la fase final de la temporada, que será conocida simplemente como «Playoff».
Hasta ahora, el sistema de puntuación para las categorías nacionales de NASCAR era de 43 puntos para el ganador (40 por posición más tres por la victoria), 39 para el segundo clasificado, 38 para el tercero… y así sucesivamente, de uno en uno hasta un solo punto para el 40º. Pero también incluían el punto extra por liderar una vuelta y el punto por liderar el mayor número de vueltas. Esos puntos de liderato desaparecen bajo esta modificación. Ahora, a final de carrera, el ganador se llevará 40 puntos, seguidos de los 35 del segundo, los 34 del tercero… y así hasta los 2 puntos del 35º. Solo habrá 1 punto de premio para aquellos que queden entre el 36º y el 40º lugar.
La introducción de tres segmentos dará puntos añadidos a los diez primeros clasificados en las dos primeras partes, con el orden de 10-9-8-7-6-5-4-3-2-1. El ganador del segmento 1 o 2 también se llevará 1 punto de playoff, que acumulará en todas las rondas del mismo (y no en la primera como hasta ahora). El ganador de la carrera también tendrá premio extra, ya que se llevará los 40 puntos de la victoria, el pase automático al playoff por el título y 5 puntos más para la misma fase final. Otro añadido es el nuevo sistema para premiar al campeón de la temporada regular, que se llevará 15 puntos más para el playoff. Los premiados volverán a ser los del top 10, con un 15-10-8-7-6-5-4-3-2-1 como base.
Para que no nos perdamos en nuestras diatribas, pongamos un ejemplo: un piloto puede obtener un máximo de 60 puntos por carrera con este sistema, 40 por la victoria y 20 de los dos segmentos. Sin victoria y sin pase al playoff automático, serían 55 los puntos a sumar. Esos 55 puntos se suman al total de la temporada regular de cada piloto, que se reactiva hasta los 2000 puntos en caso de que el piloto llegue al playoff.
En cuanto a su importancia para luchar por el título, un piloto que obtuviese cuatro victorias en la temporada regular se llevaría 20 puntos de playoff. Podemos añadir el hecho de que gane 10 segmentos, sin importar la carrera en la que lo consiga: 10 puntos más, un total de 30. Si además de todo eso es el mejor de la temporada regular se lleva otros 15 puntos, sumando 45. Ese piloto guardaría esos 45 puntos para todas las tres rondas de playoff y podría comenzar todas las rondas con esos 45 puntos de más, en lugar de solo en la primera, sin contar las posibles ganancias posteriores que se suman (si gana otra carrera serían 5 puntos más, un total de 50).
Otros cambios incluyen la posible suspensión de una carrera en caso de lluvia al acabar el segundo segmento y la determinación de los dos primeros segmentos en la primera mitad de carrera (aunque sin concretar aún en qué momento en concreto, no tienen por qué ser las vueltas 50 y 100 dentro de una carrera de 200). No se toca el acceso al playoff, con las victorias como punto clave y los puntos de la temporada regular como segunda opción para formar la parrilla decisiva de 16 pilotos. Tampoco se cambian las opciones de obtener el campeonato en Homestead-Miami, ya que no se activará ningún proceso de puntuación añadida para que el mejor de los cuatro que peleen en Miami gane el título. Para más información sobre estos cambios y sus efectos, os dejamos este vídeo y este artículo de la web oficial de NASCAR.