No es la primera vez que vemos un movimiento parecido, incluso podríamos asemejarlo a esa operación que terminó con Roger Penske como nuevo CEO de las IndyCar Series, así como el dueño del Circuito de Indianápolis, sin embargo, no deja de ser peculiar ver cómo la NASCAR ha adquirido una pista tan peculiar como la del Browman Gray Stadium. Y es que lejos de tratarse de un Superspeedway o de un circuito de altos vuelos que pudiera estar sufriendo problemas económicos, la competición de Stock Cars más famosa del planeta ha adquirido los derechos sobre uno de los trazados más cortos que se puedan encontrar prácticamente en Estados Unidos. ¿Por qué?
Hay que viajar hasta Winston-Salem, Carolina del Norte para descubrir las razones que hacen tan especial a esta pista y por qué le guardan tanto cariño sus vecinos. El trazado oval, sin banking ni curvas peraltadas, se hizo un lugar en la historia de la NASCAR al tratarse de la primera pista en las que se organizaban las conocidas como Weekly Series, una competición auspiciada por la NASCAR que se celebraba en pistas cortas tanto de Estados Unidos como de Canadá.
Conocida como ‘Madhouse’, el manicomio, la pista a simple vista parece prácticamente un estadio de fútbol americano que en lugar de estar rodeado por una pista de atletismo cuenta con un trazado oval asfaltado, pero esto se convierte en una absoluta locura cuando metes más de una veintena de stock cars en el apenas cuarto de milla del que está conformada.
Cuando hablamos de historia no exageramos, ya que la construcción del estadio se remonta a 1937 y sí, acogió partidos de fútbol, pero también se convirtió en hipódromo y a partir de 1939 también tuvo carreras de coches en un trazado que por aquel entonces era íntegramente de tierra. Fue en 1947 cuando finalmente se decidió por pavimentarla. Precisamente dos años más tarde, la NASCAR corrió por primera vez en el trazado, siendo todo un hito al tratarse de la primera carrera sobre asfalto de las series.
Con una capacidad para 17.000 espectadores, muchos han comenzado a preguntarse qué ha motivado a la NASCAR el asegurarse su arrendamiento hasta el año 2050, ya que las instalaciones siguen siendo propiedad de la ciudad. En la actualidad, las Whelen All-American Series celebra una de sus carreras más espectaculares allí, pero es en este punto cuando las especulaciones han empezado a hablar de la opción de que el trazado pueda ser en el futuro una alternativa del Los Angeles Memorial Coliseum como el trazado que acoge el Clash de pretemporada para la NASCAR Cup Series (aprovechando que el trazado angelino termina contrato). Lo dicho, una locura sólo de pensarlo…
Como la primera pista de carreras semanal de NASCAR, el Estadio Bowman Gray ocupa un lugar especial en la historia de nuestro deporte. Estamos agradecidos por el legado multigeneracional de liderazgo de la familia Hawkins en esta pista histórica y estamos encantados de supervisar las carreras en una de las joyas de la corona de NASCAR Regional. Esperamos liderar las operaciones de carreras de las instalaciones en asociación con la ciudad de Winston-Salem para preservar la historia y el legado de la pista para la próxima generación de aficionados y pilotos – Ben Kennedy, ahora vicepresidente senior de Desarrollo y Estrategia de Carreras de NASCAR
Foto | NASCAR