La futura marcha de Adrian Newey para dedicarse íntegramente al desarrollo del hipercoche Red Bull RB17 es un bombazo para la Fórmula 1…pero también una gran noticia para el sector del automóvil en general. No sería la primera vez que un ingeniero estrella de la categoría reina cambia el panorama con una obra de arte sobre ruedas – y en este caso hablamos del gurú de la aerodinámica que, entre Williams, McLaren y Red Bull, suma 25 títulos mundiales, 13 de pilotos y 12 de constructores.
Murray, Nichols y Newey, de la F1 a crear grandes obras
Newey ya nos dejó ‘flipados’ a los amantes del simracing cuando ideó el Red Bull X2010 para Gran Turismo 5, el concepto de monoplaza de fórmula libre con efecto suelo y ventilador que tenía un agarre como nunca habíamos experimentado en lo virtual. Cuando tuvo la oportunidad de hacer algo real, de la mano de Aston Martin, llegó el sensacional Valkyrie con el aullido característico de su V12 – del Valkyrie saldrá además una versión de competición que correrá en el Mundial de Resistencia.
Pero antes que Newey, quien vino de la F1 y cambió el mundo fue Gordon Murray, precisamente quien creó el F1 ventilador, el Alfa Romeo BT46B de 1978 (prohibido tras arrasar en su única carrera). En 1992 veíamos el que quizás se puede considerar el puente entre superdeportivo e hiperdeportivo: el McLaren F1 que, con su motor BMW y posición de conducción central, revolucionaba incluso todo lo que había venido de Ferrari, Porsche, Lamborghini, Jaguar o Bugatti hasta ese momento.
Para el mundo del motor, ver cómo el McLaren F1 creaba un nuevo referente, además de ganar en Le Mans en 1995 (el único GT capaz de vencer a los prototipos) y ser la referencia entre los GT1 hizo que el bólido se convirtiera en leyenda. Para el propio Murray, ahora el McLaren F1 es ‘The Old Lady’, la señora mayor. Y es que hace años que creó su propia firma, GMA, con el T.50 como sucesor directo del McLaren F1 (y con ventilador como el Brabham) para superarlo (además de un hermano pequeño, el T.33).
Además de Murray y Newey, tampoco debemos olvidarnos de Steve Nichols. El que en otro tiempo fuera hombre clave en McLaren también tiene su propia firma y creación, Nichols Cars, siendo su primer coche el N1A basado en el McLaren M1A que corrió en la década de los sesenta e inició el legado de la marca británica. El N1A es una barqueta con motor Chevrolet V8 de 460 caballos, existiendo una versión ‘Big Block’ con 650 caballos.
Adelanto del RB17 en el Festival de Goodwood
Queda claro que, cuando una figura de tal calibre quiere crear algo fuera del encorsetado reglamento de la F1, pueden llegar a surgir verdaderas obras maestras. Es por ello que esperamos con ansia lo que Newey puede llegar a hacer, teniendo en cuenta que será un hipercoche en el que podrá dar rienda suelta a sus ideas. Este mismo 2024 tendremos un adelanto en el Festival de Goodwood.