Ante insistentes rumores locales, Adam Paterson, jefe de Nissan Australia, minimizó las posibilidades de que el nuevo modelo deportivo Z sea adaptado a las reglas técnicas Gen3 y se una al Mustang y al Camaro en el Supercars. Si bien el Z es un coupé y por lo tanto puede considerarse como una opción para competir, desde Japón no tienen planes para hacerlo posible puesto que retornar al campeonato de turismo australiano requiere de la asignación de una buena cantidad de recursos.
A diferencia del Mustang y el Camaro que instalan V8 en sus respectivos chasis, el Nissan Z se comercializa con un motor V6 biturbo de unos 400 caballos. El fabricante japonés indica que el nuevo coche es un biplaza que hereda la deportividad del Datsun 240Z así que por lo tanto está muy lejos del Altima que llegó a participar en el Supercars en la época de las berlinas. Según Paterson, no tiene sentido desembolsar una significativa cantidad de dinero para competir en Australia porque ello no hará que se vendan más Z en los Estados Unidos, principal mercado del modelo.
También argumentó que el Z es un producto que no es el entandarte de Nissan, el fabricante se inclinará por los SUV eléctricos durante los próximos años, con el X-Trail y el Ariya como apuestas fuertes en el mercado comercial. Allí estará la prioridad del marketing y no en el segmento deportivo. Explicó que Nissan construyó el Z para honrar su pasado, pero hasta allí. No es viable aferrarse a enfoques tradicionales cuando la mayoría de los consumidores exige modernidad.
En palabras de Adam Paterson:
No creo necesariamente que la participación en una categoría de deportes motor haga que se venda una tonelada más de Zs, que es el verdadero objetivo. Cualquier actividad o iniciativa debe tratar de apoyar a toda la gama, que es algo que se lograría con la participación en algo así. Ahora necesitamos establecer nuestra fortaleza en la electrificación, que es donde se moverá el volumen de nuestros productos en el futuro.
Vía | Speedcafe