Stephen Lester, nombrado este año jefe de Nissan Australia, manifestó que el programa orientado al Supercars será evaluado en la temporada 2018. Si los resultados en pista no están acordes con lo esperado en Japón, se tomará una decisión en cuanto a proseguir en el torneo. Este año compitieron con cuatro unidades Altima L33 y el mejor piloto fue Michael Caruso, quien culminó en el puesto trece. Ninguno de los cuatro pilotos afiliados al equipo de fábrica alcanzó victorias y poco pudieron hacer contra los Holden VF Commodore y los Ford FG X Falcon.
Por su parte, Scott Sinclair, jefe del equipo oficial Nissan en el Supercars es consciente de lo importante que será la próxima temporada porque más allá de la competición, la inversión realizada requiere de un retorno y de no producirse beneficio alguno, los jefes de Nissan estarían meditando trasladarse a otros ámbitos más rentables. Hasta ahora están confirmados como pilotos Michael Caruso, Rick Kelly, Simona de Silvestro y André Heimgartner; y también se espera una mayor inyección de recursos para intentar poner al día al Altima con respecto a sus rivales.
Añadió Sinclair que una de las principales debilidades está identificada que es la gestión de los neumáticos, situación que les afectó desde el inicio y no pudieron revertir durante la temporada. Los resultados no se pueden ocultar, los Nissan Altima tuvieron un desempeño decepcionante y por tal razón solicitaron una mayor implicación de los ingenieros de la fábrica para el 2018. Todos en el equipo están al tanto que de no conseguir resultados lo más probable es que Nissan Motorsport finalice su aventura en el Supercars.
Esto es un negocio y aquí lo que podemos controlar son nuestros resultados en la pista. Como equipo no debemos estar cegados por las últimas carreras porque en general ha sido un año decepcionante, no hay dudas al respecto. Tenemos que rectificar, somos transparentes con Nissan sobre eso, tal vez ayude en cualquier decisión que ellos tomen.
Vía | Speedcafe
