El DTM necesitaba como el comer un tercer fabricante para asegurar su existencia. Era un requisito exigido por Audi para seguir tras la marcha de Mercedes. Y más allá del acuerdo con el Super GT japonés, se había hablado de Aston Martin. Pues bien, este jueves ha llegado la confirmación: R-Motorsport y HWA se han alineado con el fabricante británico para participar en el campeonato a partir de la próxima temporada.
Si bien el comunicado hace referencia explícita a 2019, también intenta matizar la fecha de debut de estos nuevos coches basados en el Aston Martin Vantage al explicar que todo dependerá de que «el desarrollo de los coches de carreras avance tal y como está previsto». Aún así la asociación con HWA, socio eterno de Mercedes-Benz da ciertas garantías en cuanto al éxito del proyecto. Además R-Motorsport ha demostrado su buen hacer con los GT3 de Aston Martin.
De salir adelante, sería el primer fabricante de fuera de Alemania en desembarcar en el DTM desde que resurgiera el certamen bajo su actual formato en el año 2000. MG lo intentó pocos años más tarde, pero entonces su acuerdo con Zytek se vino abajo ante las dificultades por las que pasaba toda la industria del motor británica.
