En un mercado de fichajes donde la mayoría de pilotos han optado por ser conservadores a la espera de un gran baile de cara a 2019 hoy ha caído la primera bomba. Red Bull Racing ha anunciado la renovación del contrato de Max Verstappen hasta 2020, lo cual liga al neerlandés a Milton Keynes tres temporadas más con independencia del futuro a nivel de motores del equipo. Otra cosa es que acalle los rumores del interés de otros equipos por el joven neerlandés, claro.
En la nota de prensa Max Verstappen recuerda la confianza depositada en él por Red Bull al hacerle debutar en Fórmula 1 con tan sólo 17 años y subir a su primer equipo apenas una temporada más tarde, como si ello hubiera pesado más que la frustración acumulada esta temporada con tantas y tantas averías mecánicas. Es lógico que la victoria en Malasia y el buen rendimiento en Japón hayan allanado el camino hacia esta renovación.
Con un primer espada ya atado, ahora Red Bull debe atar su futuro motorista después de que Renault le haya comunicado su intención de acabar con la relación que les une desde 2007 a finales de la próxima temporada. Y de ello y del rendimiento del motor Honda montado por Toro Rosso el año que viene probablemente dependerá también el futuro de Daniel Ricciardo. Si no, siempre se guardan la opción de repescar a Carlos Sainz…
Foto | Red Bull Content Pool
