El circuito de Monza ha sufrido múltiples cambios en preparación para acoger el Gran Premio de Italia 2024, algo que no convence a los pilotos debido a la posibilidad de que pierda parte de su esencia. La pista situada en la región de Lombardia solo se ha ausentado del calendario de la Formula 1 en una ocasión, en 1980, desde el inicio de la era moderna de la categoría en 1950. Los pianos estrechos y robustos eran una de sus características principales y suponía un reto para los pilotos a la hora de afrontar las variantes.
Los cambios realizados incluyen un reasfaltado completo de la pista, un ligero rediseño de la primera chicane y una modificación significativa de la naturaleza de los pianos, siendo este último el que ha generado más revuelo. Resulta especialmente notable el de la Variante Ascari, que ha cambiado por completo, pues ha pasado de ser considerablemente estrecho y alto, lo que obligaba a los pilotos a perfilarlo con finura a ser más ancho y plano, lo que permitirá a priori atacarlo con dureza.
El piloto de McLaren Oscar Piastri se ha mostrado preocupado acerca de las posibles consecuencias que puedan tener los cambios en lo que a los retos que presenta el circuito respecta.
«No he probado la versión rediseñada en el simulador. El reasfaltado será bienvenido. En cuanto al rediseño de la chicane (Ascari) tendremos que esperar y ver. Sin haber salido a pista, parece algo más sencillo. Aunque estoy seguro de que no lo será cuando encaremos esa sección. Sencillamente, espero que no hayan quitado a la pista parte de su carácter. Monza siempre ha sido un circuito histórico, fantástico para la competición y con características únicas. Algunos de los pianos, por ejemplo en Ascari, son muy diferentes a aquellos de los otros circuitos que visitamos. Y ahora son muy, muy planos. Espero que no hayan quitado carácter a lo que es un circuito divertido e histórico.»
Texto y fotos realizadas por Alejandro Alonso, presente en el Autodromo Nazionale Monza para Diariomotor.
