Rally de Estonia 2020: Ott Tänak y Martin Järveoja logran en casa su primera victoria con Hyundai

Las últimas tres especiales del Rally de Estonia no traían sorpresas, aunque sí grandes sustos. Con los tres primeros clasificados en apenas medio minuto, cualquier error se podía pagar muy caro, sabedores además de que en un Mundial a siete pruebas ya hay algunos pilotos que han gastado su comodín, comenzando en este caso por el vencedor final de la primera presencia del país báltico en el calendario de las series intercontinentales, Ott Tänak.

Aun así, a buen seguro que Andrea Adamo se llevaba las manos de la cabeza cuando Ott Tänak sufría un susto muy parecido al que llevó ayer a Neuville a la retirada. El estonio se veía escupido de la línea en un interior, sin embargo, conseguía controlar el Hyundai i20 Coupé WRC y evitaba dañar uno de los ejes para terminar la penúltima especial. Llegaban sin parte del paragolpes trasero a la meta y tal vez verían afectadas sus prestaciones en el último recorrido del día, pero al menos se mantenían en la carrera hacia la primera victoria de Ott y de Marin Järveoja con la firma surcoreana.

Fin de semana para olvidar en el caso de Thierry Neuville y Nicolas Gilsoul. Después de su abandono ayer, la pareja belga salía a los tramos del domingo con la necesidad de sumar los cinco puntos en la Power Stage para tratar de mantener vivas sus opciones de título. Lo hombres de Hyundai salían prácticamente de paseo en las otras cinco especiales de trámite, sin embargo, a su salida al tramo que reparte los puntos extra, un problema aparentemente electrónico le llevaba a perder mucho tiempo, saliendo ya con el launch control activado mucho antes de su hora de salida. Finalmente retiraban el coche en el enlace para evitar daños en el motor.

A pesar de este mal resultado de Neuville, Craig Breen jugaba a la perfección el papel para el que se le había reclutado de cara a esta prueba, consiguiendo su mejor resultado con el equipo con sede en Alzenau y asegurando unos puntos muy importantes de cara al apartado de constructores, con el añadido de que ha servido de barrera entre Tänak y Sébastien Ogier, el cual completaba el podio por delante de Elfyn Evans y Kalle Rovanperä. El francés se mantiene líder de la general (79 puntos por los 70 de Evans y los 66 de Tänak) y tendrá que abrir pista en Turquía, una de las citas en las que más problemas ha tenido durante los últimos años y en las que obviamente el partir primero a los tramos del viernes puede pasar mucha factura. Incluso en las segundas pasadas, con pocos coches inscritos, también será determinante.

Quizás la mejor nota del día para Toyota la ponía de nuevo Kalle, el cual se anotaba su segunda Power Stage del año (seguido por Evans, Tänak, Ogier y Breen) después de lograr en Suecia su primer scratch en el Mundial al llevarse el último tramo en la cita escandinava. En Estonia llegó a colocarse líder, aunque el problema con la delaminación de su neumático trasero derecho y posteriormente la penalización de un minuto lo retrasaron incluso detrás de un Takamoto Katsuta que no pudo llevar el Yaris WRC «a casa». El joven finés volador, que cumplirá en octubre 20 años, terminaba la cita con cinco scratchs de 17 posibles y un buen quinto puesto que podía haber sido mucho más.

Desquiciante para los pilotos de M-Sport, los cuales han tenido que pelear con la falta de velocidad del motor del Ford Fiesta WRC que les ha llevado a tener que esperar los abandonos para meterse sexto y séptimo, llegando incluso Esapekka Lappi a mostrar su estado anímico diciendo que «quizás era el piloto» la razón de tan bajo rendimiento durante este fin de semana. Gus Greensmith terminaba a espaldas de los pilotos oficiales, de nuevo como último piloto de la categoría y tratanto de dar pasos adelante a pesar de la poca preparación.

En WRC2, el fin de semana no podía terminar sin el dramatismo que ha sido una constante durante el resto del rally. Si ayer fueron los pinchazos protagonistas, hoy la última especial también estaría marcada por un problema con la rueda delantera izquierda en el Hyundai i20 R5 de Nikolay Gryazin, el cual perdería la segunda posición de la prueba después de llegar con el neumático completamente destrozado a la meta. El ruso, que necesitaba un buen resultado para cortar su mala racha se quedaba sin el premio al buen trabajo, mientras que otro piloto muy necesitado como Adrien Fourmaux heredaba dicha plaza a espaldas de Mads Ostberg.

El veterano piloto noruego amplía su ventaja al frente del campeonato, agradeciendo una vez más el trabajo realizado por Citroën en el desarrollo del C3 R5, mientras que Fourmaux logra aliviar la presión después de su temprano accidente en Roma y el pequeño vuelco en los test previos al Rally de Estonia. Oliver Solberg por su parte completa su exitoso verano después de la victoria en WRC3 que se suma al podio logrado en Roma y la victoria en Liepaja, estando muy cerca del liderato en el Campeonato de Europa absoluto y siendo líder del ERC1 Junior. El sueco tratará de pelear por las tres categorías en un programa modificado para este final de 2020. Jan Solans, que estaba realizando un domingo positivo, lo suficientemente bueno para meterse en el Top10 de su categoría, perdería 4 minutos en la última especial por un pinchazo y caía posiciones. Martin Seks se llevaba el triunfo por su parte en JWRC, campeonato que ha tenido que modificar su calendario y completará el año en Cerdeña e Ypres.

Clasificación final – Rally de Estonia 2020:

Clasificación general pilotos – WRC 2020:

Clasificación general equipos – WRC 2020: