Aunque se les pueda presuponer cierta agilidad debido a su preparación en algunos casos para la competición, es cierto que es difícil asociar al concepto Trail de las motos a un pilotaje agresivo o más centrado en el espectáculo y el sobrepasar espectáculos con motos muchas más ligeras. Sin embargo, una vez más queda patente que una herramienta puede ser más que válida para otro menester para el que fue diseñada en manos del perfecto artesano. Y es que el resultado de dejarle a Pol Tarrés la Yamaha XTZ700 Ténéré es una absoluta locura.
Obviamente no estamos delante de una KTM 450 Rally o de una Honda CRF 450 Rally que se emplean año tras año en el Rally Dakar, pero la facilidad con la que mueve Tarrés, sobrino del icónico Jordi Tarrés, es todo un espectáculo visual que nos demuestra a la perfección que una trail de casi 200 kilogramos puede ser todo un juguete en manos expertas, haciéndola parecer una moto de enduro por la velocidad con la que se mueve en pistas de tierra o en la arena, así como la facilidad con la que encara saltos más propios del Trial.
Debemos tener en cuenta por ejemplo que una KTM 450 Rally Replica homologa un peso en seco de tan solo 139 kg (por los 185 kg de una Ténéré de serie), algo a lo que obviamente debemos sumar el combustible con el que suelen salir los motards a las etapas del Dakar. Tener ese tacto de gas con el propulsor bicilíndrico de 689 cc y 75 CV de potencia de la marca de los diapasones es toda una oda a la belleza del off-road.
Si a todo ello le sumas el gran trabajo de los hermanos Echeverría detrás de las cámaras y el cameo realizado por Ahikar Azcona, de “La Casa de Papel”, el resultado es completamente espectacular y nos demuestra como cada mes de enero todo lo que se puede hacer con este tipo de monturas y por qué los pilotos de raids y enduro son considerados de los más completos en el mundo de las dos ruedas.