Un incidente entre el Lamborghini Huracán GT3 Evo 2 de Misha Goikhberg y el Chevrolet Corvette Z06 GT3.R de Orei Fidani propició el único régimen de bandera amarilla del Gran Premio de Long Beach, tercera fecha del Campeonato IMSA Sportscar. Esta situación, a falta de una hora y veinte minutos para el final, permitió al equipo Porsche Penske Motorsport entrar en boxes y salir por delante de la representación de BMW que para entonces lideraba la carrera. De esta forma, la pareja conformada por Felipe Nasr y Nick Tandy se mantuvo invicta en el campeonato ya que el 963 número 7 recibió la bandera a cuadros 3.058 segundos por delante del número 6 tripulado por Matt Campbell y Mathieu Jaminet.
En esta ocasión solamente se midieron los prototipos de la clase GTP y los coches de la clase GTD, en un evento que al ser en un circuito callejero se esperaba un mayor número de incidentes, pero no fue así y la única parada realizada por Porsche Penske Motorsport resultó suficiente para imponerse. Dries Vanthoor entró a boxes en primer lugar cediendo la posición a Sheldon van der Linde, lo que hacía presagiar que ambos BMW M Hybrid V8 estarían decidiendo, pero la estrategia de Porsche, de solamente cambiar piloto, neumáticos traseros y cargar combustible suficiente para completar el recorrido, no pudo ser descifrada por BMW. Al final, Philipp Eng, compañero de Vanthoor, mantuvo el tercer lugar, un premio agridulce para el Team RLL BMW tras salir desde la pole.
El mejor representante de Cadillac en esta ocasión fue el prototipo de Action Express pilotado por Earl Bamber y Jack Aitken, culminando en cuarto lugar por delante del otro BMW, el número 25 que Marco Wittmann llevó a la meta. Tanto Cadillac como Acura no pudieron ser protagonistas y apenas quedaron como espectadores, los dos coches de Wayne Taylor Racing finalizaron sexto y séptimo respectivamente, con el número 10 por delante del 40, en tanto los dos Acura ARX-06 no justificaron su presencia al carecer de ritmo y el coche de Renger van der Zande experimentar problemas con su cubierta motor que le hizo entrar a boxes y perder una vuelta. Por su parte, el Aston Martin Valkyrie, de Roman De Angelis y Ross Gunn terminó en octavo lugar, mejorando el noveno alcanzado en Sebring, para beneplácito de los entusiastas del motor V12 de 6.5 litros.
En lo que respecta a la clase GTD, el Porsche 911 GT3 R No. 177 de AO Racing, conocido popularmente como Rexy, se llevó los honores con Laurens Vanthoor y Jonny Edgar al volante. Si bien este coche es el mismo que compite en la clase GTD Pro, inclusive ganó en Sebring, pero en este caso la alineación fue modificada para formar parte de este evento. Al igual que ocurrió en la clase GTP, AO Racing le hizo un overcut al equipo Vasser Sullivan, que también inscribió su coche GTD Pro para adicionarlo al otro que compite habitualmente en la clase GTD. Vanthoor salió por delante del Lexus RC F GT3 número 12 de Parker Thompson y de Jack Hawksworth, que antes de la bandera amarilla venía dominando la carrera, y también del otro Lexus, el número 89, de Frankie Montecalvo y de Aaron Telitz, siendo este coche el proveniente de la clase GTD Pro.
Completaron los cinco mejores en meta el Mercedes-AMG GT3 de Winward Racing, tripulado por Russell Ward y Philip Ellis, por delate del BMW M4 GT3 EVO de Turner Motorsport, con Patrick Gallagher y Robby Foley. En esta carrera reapareció Robert Wickens acompañando a Tommy Milner en el Chevrolet Corvette Z06 GT3.R de DXDT Racing modificado, sin embargo, una colisión perjudicó a Milner, mientras marchaba cuarto a 20 minutos para el final. Los daños eran muy evidentes así que fue obligado a entrar a box para reparar el coche, regresando a pista y culminando la prueba en el puesto 15 para esta interesante iniciativa que instala un avanzado volante en el turno de Wickens.