La decisión de retirar dos de las unidades de los Porsche 911 RSR GTE que iban a competir en las 24 Horas de Le Mans 2020, las dos norteamericanas, fueron una pequeña muestra de la desconexión que se estaba a producir entre Porsche y Estados Unidos. No ha habido que esperar demasiado para encontrarnos con uno de los golpes a la resistencia norteamericana, propiciado en este caso por la confirmación de que Porsche ya no seguirá compitiendo en el IMSA dentro de la categoría GTLM.
Las 12 Horas de Sebring que se celebrarán el segundo fin de semana de noviembre será por tanto el momento de decir adiós a los 911 RSR GTE/GTLM en los circuitos estadounidenses, no confirmándose si estos pueden o no hacer una aparición cuando el WEC visite este mismo circuito ya en 2021 después de que se haya cancelado la edición de 2020 de las 1.000 Millas.
Campeones la pasada temporada tanto de fabricantes como de pilotos en el GTLM de 2019, Porsche se va por las repercusiones que está teniendo la pandemia en la marca, aunque esta decisión no tiene por el momento un efecto directo en la posibilidad de que la marca germana valore construir un LMDh para poder competir en el IMSA WeatherTech SportsCar o en el WEC en el futuro, algo que aseguraron abiertamente después de que se dieran las primeras claves de la reglamentación diseñada en colaboración entre los norteamericanos y el ACO.
La decisión de finalizar nuestro compromiso oficial con IMSA no fue fácil para nosotros. Pero dada la situación actual de la compañía debido a la pandemia de coronavirus, tiene sentido que Porsche Motorsport deba contribuir a las medidas tomadas para detener las repercusiones económicas. Hemos discutido este retiro con todas las partes involucradas y nos gustaría agradecer a Jim France y sus equipos de IMSA por su comprensión – Fritz Enzinger, vicepresidente de Porsche Motorsport
La situación empuja a replantearse al IMSA la categoría GTLM, la cual debe esperar a la decisión de BMW RLL acerca de los M8 GTE para saber si los Corvette C8.R GTLM pueden quedarse solos compitiendo a tiempo completo por la victoria dentro del apartado de los fabricantes. La retirada de Porsche no afectará ninguno de sus programas para clientes en Norteamérica, incluidos los equipos de la clase GT Daytona, IMSA Michelin Pilot Challenge y la serie Porsche GT3 Cup Challenge de EE. UU. y Canadá. Por delante, Porsche y CORE Autosport tendrán 10 carreras para despedirse por todo lo alto.