Porsche es una marca que cuida mucho su legado, aunque en algunas ocasiones ha mantenido algunos proyectos pasado bajo el más absoluto secreto. Uno de esos secretos se desglosó tiempo atrás, pero precisamente han trabajado en un proceso de restauración, de manera que han vuelto a rodar con uno de sus grandes ¿y si…?, un coche que podría haberles dado victorias en Le Mans.
Porsche vuelve a probar su LMP2000 25 años después
En ocasiones anteriores ya hemos contado en estas páginas la historia del Porsche LMP2000. Un prototipo de Le Mans que no llegó a ver la luz, aunque sí que lo hizo su motor, el 5.5 V10 (tomado a su vez del 3.5 V10 que Porsche había preparado para la Fórmula 1 de cara a 1993 tras su fracaso con Footwork en 1991) que se agrandó a 5.7 para el Carrera GT. Incluso llegó a aparecer en el Festival de Goodwood de 2018, siendo la primera vez que se ‘desglosaba’ este prototipo en tantos años.
Ahora, en Weissach, el LMP2000, también conocido como 9R3, ha vuelto a verse en acción, pues el coche se ha restaurado 25 años después de que se hubiera cancelado y quedado en el olvido. Nada menos que Allan McNish, quien era piloto de la marca originalmente y llegó a conducirlo para los primeros test que se hicieron (al igual que Bob Wollek), ha vuelto a subirse a la máquina que debía retar al Audi R8, el cual acabó dominando Le Mans en aquellos años.
Se trata de un prototipo que bebía del desarrollo de coches anteriores, como el Dauer 962 ganador de Le Mans 1994 o el Porsche 911 GT1 que también logró triunfar en La Sarthe en 1998. Para continuar en la lucha, Porsche necesitaba un prototipo, pero al descartarse el seis cilindros 3.2 biturbo del GT1 (ya no era tan ventajoso frente a los V8 rivales, que además podían utilizarse como parte estructural) se descartó el LMP900 previsto para 1999 (Mulsannes Corner).
Este 9R3 era, en definitiva, la continuación del proyecto LMP900 con el motor V10, el cual podía ser tanto un 5.0 como un 5.5 aumentando tanto en carrera como en diámetro. La suspensión también se rediseñó no tanto para realojar el nuevo motor como para aprovechar mejor los desarrollos de neumáticos más recientes. El coche prometía, a juzgar por los comentarios de McNish y Wollek, pero un acuerdo entre Ferdinando Piech y Wendelin Wiedekin para colaborar en el Cayenne, el que junto al Boxster ayudó a reflotar Porsche como compañía.
Porsche y su especial cariño a su legado, tanto de calle como de carreras
Here we go then – the glorious V10 howl of the Porsche 9R3 (LMP2000). pic.twitter.com/DxjRfk8zxb
— Davey Euwema (@daveye97) October 17, 2024
Así es como suena el motor del LMP2000, restaurado un cuarto de siglo después de que fuera descartado – ya fuera por el bien del Cayenne en el mercado o por no meterse en una lucha fratricida contra Audi. Un sonido de motor V10 que sería reutilizado, cortando dos cilindros y reduciendo su cilindrada a 4.0, para el Porsche RS Spyder LMP2 posterior (9R6) que también lograría éxitos en resistencia años después.
Una prueba más del gran cariño que le dedica Porsche a su legado, precisamente en el año que celebra el medio siglo de vida del 911 Turbo. Precisamente hace unos días veíamos como, en conjunto con Michelin, desarrollaba unos neumáticos específicos para los clientes del Porsche Carrera GT, el superdeportivo de ensueño que heredó el motor de este LMP2000.
