En una edición marcada por la lluvia y la niebla, que obligó a parar la prueba durante varias horas, al final el triunfo recayó en la marca que había marcado la pauta ya en entrenamientos. Manthey Racing dio a Porsche la victoria en las 24 Horas de Nürburgring 2018 aunque no con su primera bala: fue el #912 de Fred Makowiecki, Richard Lietz, Patrick Pilet y Nick Tandy el que se impuso tras un adelantamiento en la resalida tras dos horas de parón al Mercedes-Benz #4 de Black Falcon.
En manos de Adam Christodoulou no sólo poco pudieron hacer para frenar al coche de Manthey, sino que además el británico hizo un trompo tratando de defenderse de Makowiecki y poco más tarde besó los guardarraíles. Pero el suspense se mantuvo hasta pocos minutos antes de la caída de la bandera a cuadros, tanto por las delicadas condiciones de la pista como porque aún debían hacer ambos equipos una última parada, que sin embargo poco cambió. Christodoulou se debió conformar así con el segundo puesto junto a Engel, Metzger y Dirk Müller.
Pese a que se le escapó el triunfo, el resultado fue excepcional para Black Falcon, que colocó otro coche en el podio al adelantar el #5 de Buurman, Jäger, Seyffarth y Stolz a la gran sorpresa de la prueba, el Aston Martin oficial de Martin, Sörensen, Thiim y Turner, y otro más en quinta posición. Muy poco faltó para que un coche británico se subiera al podio frente a los potentes escuadrones de las marcas alemanas en Nürburgring, pero finalmente dieron al palo.
Frente a sus discretas prestaciones en clasificación los Audi mostraron un mayor ritmo de carrera gracias a cambios de última hora en la Balance of Performance, pero los distintos incidentes hicieron que el mejor de los R8 LMS GT3 fuera tan sólo sexto, concretamente el de los ganadores de la edición 2017, Land Motorsport. Pero siendo sinceros, la carrera fue en todo momento un toma y daca entre Porsche y Mercedes, reponiéndose la primera a la pérdida de su gran baza pasada la medianoche: el #911 derrapó sobre una mancha de aceite con Romain Dumas al volante y acabó destrozado. Eso sí, minutos antes acababa de ser sancionado con varios minutos por no respetar un Código 60.
Entre los españoles, tanto muy buenas noticias como muy malas. El que mejor lo tenía de cara a la general no acabó la carrera. Dani Juncadella arriesgó bajo la lluvia y con la filosofía de «puerta grande o enfermería», acercándose ya a los coches de cabeza, finalmente se accidentó con su Mercedes #47. En cambio asistimos a dos triunfos de categoría por parte de compatriotas. Jordi Gené fue 32º de la general y se impuso entre los TCR al volante de un Cupra de Bas Koeten junto a los finlandeses Buri, Laaksonen, y Kangas. También ganó en V5 Carlos Arimón con un Porsche Cayman compartido con Büllesbach, Schettler y Smyrlis. Y Nicolás Abril acabó 8º en SP3.
Foto | Porsche Motorsport