Era peculiar la imagen paseando por delante de los boxes del Circuito de Cheste a finales de 2021. Los test de pretemporada de la Fórmula E nos mostraban una nueva era para el campeonato, esa especie de temporada de transición que afrontó la Fórmula 1 el año pasado y parece que también es la realidad para el campeonato de monoplazas eléctrico en este año que queda de espera hasta la llegada de los Gen3.
Entre el ruido intenso de las pistolas neumáticas y los atornilladores eléctricos, se podían observar los principales cambios en los coches, sin duda siendo el más significativo el experimentado dentro del box de Andretti, donde los colores corporativos de BMW habían dejado paso a los del nuevo ‘Title Sponsor’ del equipo norteamericano, la compañía Avalanche, aunque en el morro se mantenía el logotipo de los bávaros, haciendo referencia a que seguirán utilizando su tren motriz durante este 2021-22 después de que el final de la relación profesional se haya producido en buenos términos entre ambas partes.
Las tres jornadas de pruebas nos dejaron hechos noticiables como el debut de un Antonio Giovinazzi con semblante frustrado tras el primer día, así como el dominio ejercido por Venturi, en este caso con Edoardo Mortara a la cabeza, el cual impuso el monoplaza de la estructura dirigida por Susie Wolff y Jerome D’Ambrosio (ahora director adjunto de Venturi Racing tras retirarse), además de mostrarle a Lucas di Grassi que el equipo en el que ha recalado quiere ser protagonista.
Aunque es evidente que, en estas condiciones, sigue siendo Mercedes EQ, precisamente el mismo responsable en motorizar a Venturi, el que parte como gran favorito después de coronarse en la primera edición del Campeonato del Mundo de Fórmula E y situando a Nyck de Vries y a Stoffel Vandoorne como los candidatos destacados ante esta temporada 2021-22 que está a punto de iniciarse en Ad Diriyah, Arabia Saudí, los próximo 28 y 29 de enero.
Es en este punto donde irrumpe la figura de Porsche, casi en lo que parece una reedición del duelo entre Red Bull y Mercedes vivido en la Fórmula 1 durante 2021, pero con ese componente aún más personal de que Pascal Wehrlein se trata de otro de los pilotos que salieron de la cantera de la firma de la estrella y ahora se ha convertido en el gran estandarte de la estructura de sus grandes rivales de Stuttgart. Tras una primera temporada tan condicionada por la pandemia en la que disputaron gran parte de las pruebas en Tempelhof, la segunda campaña de Porsche demostró que tienen mucho margen de mejora, incluyendo la llegada del joven piloto germano procedente de Mahindra.
En la primera temporada sueles familiarizarte con las pistas y ganar experiencia para poder afrontar la segunda temporada bien preparado. Pero fueron exactamente estas experiencias las que faltaron porque la pandemia arruinó nuestra temporada de rookies y disputamos más de la mitad de todas las carreras en Berlín – André Lotterer
La temporada crucial de Porsche en Fórmula E comienza ahora:
La presión es aún mayor para ellos si tenemos en cuenta que será la última oportunidad de superar a sus grandes rivales estando ambos en pista y a la espera de encontrarse, quién sabe, en un futuro dentro del Gran Circo. Porsche confirmó que estará entre los Gen3 (al menos hasta la temporada 2023-24), sin embargo, tras dos temporadas ya en la parrilla de la Fórmula E, todo parece apuntar a que ha llegado el momento de ir un paso más lejos que lo que reflejan esos dos podios y una Pole Position logradas en la campaña pasada, además de esa victoria de Pascal en puebla que le sería arrebatada por un error administrativo.
Wehrlein y Lotterer, además de talento a raudales, ya han conseguido acumular esa experiencia necesaria para competir por los éxitos dentro de las series eléctricas, el equipo también ha crecido mucho y han cambiado su forma de trabajar en muchas áreas, llegando a unos índices de profesionalismo similares a los que muestra la Fórmula 1. Por el camino, muchas cosas que asimilar, entre ellas el aumento de potencia de los motores que tendrán los Gen2 en esta última temporada en competición, así como los cambios en clasificación y carreras más largas en las que se ha solventado también la problemática vista en Valencia con los periodos de bandera amarilla y coches de seguridad que reducían la cantidad de energía que podían utilizar los pilotos.
Sí, obviamente tenemos más potencia ahora. Las carreras también serán más largas y tendremos que cuidar un poco más los neumáticos traseros, así que cambia un poco para las tandas largas. Estamos intentando hacer que el coche sea un poco más amigable. Estamos viendo que los sistemas de hardware se pierden un poco con los aumentos de potencia, pero tenemos otras herramientas desde el lado del software para tratar de ver cómo es nuestro ritmo aquí – Amiel Lindesay
Si en Mercedes seguramente han dado por bueno el dicho de “si algo va bien, no lo toques”, en el caso de Porsche, la marcha de Pascal Zurlinden, ha abierto la oportunidad de una reorganización que en principio también afecta al equipo germano. Además de la cara visible de Amiel Lindesay, jefe de operaciones, se espera que de cara a esta temporada Florian Modlinger cambie Abt por su llegada a la estructura de Porsche en Fórmula E tras la toma de poderes en la división de motorsport de Thomas Laudenbach, nuevo vicepresidente de la sección.
En unas declaraciones recientes a medios internacionales, el propio Laudenbach añadió algo más de presión al equipo, queriendo adoptar ese peso específico dentro del campeonato que por el momento no ha tenido Porsche: «El éxito no fue tan bueno como esperábamos o como queríamos. Es un hecho. El objetivo es claro, queremos ganar carreras en la Fórmula E, y después luchar por el campeonato«. Todas las cartas están sobre la mesa, ahora le toca a Porsche convertirse en esa Red Bull Racing de la Fórmula 1. En el equipo saben que no se aprovecharon todas las oportunidades en 2021, por lo que llegan con muchas ganas de morder a este año.
Tenemos lo que se necesita para ser competitivos al más alto nivel. Y lo hemos probado. Sin embargo, mirando hacia atrás en la temporada 7, también tenemos que admitir que al final del día no cumplimos nuestras propias expectativas. Hubo varias carreras en las que simplemente no fuimos lo suficientemente buenos. Especialmente en la primera mitad del año, desperdiciamos puntos, lo cual fue muy costoso. Por otro lado, fuimos uno de los equipos más consistentes en la segunda mitad de la temporada y anotamos puntos regularmente. Nuestra posición en la tabla de puntos no refleja realmente dónde estamos actualmente con el equipo. Tenemos el potencial para ganar carreras – Amiel Lindesay
