Llegamos al Gran Premio de Japón, llegamos al Circuito de Suzuka. Seguramente éstas tres últimas palabras ya serán suficientes para que más de uno rememore grandes recuerdos del pasado, especialmente teniendo en cuenta que, de las 30 ediciones disputadas de la carrera, muchas de ellas sirvieron para decidir los títulos, empezando por aquel duelo dramático entre Michael Schumacher y Kimi Räikkönen, la rotura del Ferrari en 2006 del germano que le privó de culminar su remontada o los tres títulos mundiales de Ayrton Senna que se cerraron aquí.
Es una pista que encandila a aficionados y pilotos con un trazado que premia a aquellos que logran un buen feeling sobre su asfalto desde el primer instante, especialmente en el primer sector, muy fluido, con muchos cambios de dirección que obligan a tener un monoplaza con un buen término de medio entre agilidad y estabilidad en curva rápida. Territorio Michael Schumacher con hasta seis victorias, este año Lewis Hamilton puede alcanzar a su predecesor en el equipo Mercedes después de haber sumado las últimas dos victorias en Japón.
El circuito cuenta con una cuerda de 5.807 metros, lo que sumado a las 53 vueltas programadas nos da una distancia total de carrera de 307,471 kilómetros que se pueden ver alterados dependiendo de si se siguen alterando las previsiones meteorológicas. La FIA ha confirmado que apenas hay cambios más allá de la introducción de un kerb doble a la derecha de la curva 130R en lugar de la hierba artificial, mejorándose también en ese punto el drenaje. Solo hay una zona de DRS, con la detección antes de la chicane y la activación para la recta de meta.
Promete ser un fin de semana pasado por agua con la amenaza del tifón Hagibis sobre las cabezas de todo los que conforman el paddock del Mundial de Fórmula 1. Acercándose ya a las costas de Japón y poniendo en aviso tanto a la FIA como a los responsables de las series y del propio Circuito de Suzuka. “Se hace todo lo posible para minimizar los trastornos en el programa de F1, pero la seguridad de los fans, competidores y todos los presentes en el circuito de Suzuka sigue siendo la máxima prioridad”
De esta forma, el promotor del Campeonato Nacional de F4 ha cancelado la cita que iba a servir de telonera para las sesiones de la Fórmula 1 este fin de semana, en este caso por seguridad ya que ellos debían establecerse en un paddock provisional que llegadas fuertes rachas de viento podía haber sido peligroso. Por el momento, el día en que promete haber más incidencia es el sábado, con la sesión de clasificación siendo susceptible a revertir cambios de confirmarse las previsiones menos optimistas. Queda por ver si los últimos coletazos del tifón pueden dejarnos también condiciones de mojado para el domingo.
En cuanto a los neumáticos, aunque este año la gama Pirelli es un paso más dura que la de 2018, Pirelli ha empleado los tres compuestos más duros de su gama: C1 como compuesto blanco-duro, C2 como amarillo-medio y C3 como rojo-blando. Es un asfalto considerado como muy abrasivo, lo que somete a mucho estrés al neumático a pesar de que quizás las frenadas más fuertes son la previa a la horquilla de izquierdas y la de la chicane. Son Spoon y 130R las que llevan al límite a las gomas, sumado a ese primer sector
Japón siempre es una de las carreras más emocionantes e impredecibles del año, con Suzuka como una pista de la vieja escuela que premia la valentía y el compromiso. Debido a las considerables demandas que las curvas colocan en los neumáticos, hemos seleccionado la combinación más dura posible en nuestra gama, lo que debería ayudar a los pilotos a dar al máximo incluso con una estrategia de una sola parada. Esto es lo que los equipos casi siempre buscan, y la mayoría de los pilotos eligieron en Suzuka el año pasado. También es conocida por su clima variable, por lo que no sería sorprendente ver que los neumáticos para clima húmedo aparezcan en este circuito famoso y exigente – Mario Isola
¿Cómo llega la Fórmula 1 al Gran Premio de Japón?
Dos semanas entre carreras han permitido que los ánimos en Ferrari se hayan calmado. Tiempo para hablar las cosas y para volver a reconducir la situación tan delicada que siempre ha supuesto tener a un piloto ya consolidado todavía con hambre de victoria y la llegada de un joven talentoso que quiere el mismo status de número uno que tiene el veterano. Las tres victorias consecutivas fueron cortadas de raíz por Lewis Hamilton en Sochi, algo que le permite tener 73 puntos de renta sobre su compañero, Valtteri Bottas, por lo que, a falta de cinco grandes premios para el final, el momento del sexto campeonato parece acercarse.
Mercedes-AMG F1 lo tiene quizás más a tiro ya que los 162 puntos que actualmente ostentan de ventaja sobre Ferrari les da la posibilidad de cantar el alirón este mismo fin de semana. ¿Qué necesitan? La firma de la estrella apenas tiene que sacar 14 puntos más que los de Maranello para cerrar un nuevo año de dominio híbrido. Por su parte, Red Bull juega en casa ya que llegamos a la antigua pista de test de Honda, por lo que conseguir redimirse de los últimos años y los resultados negativos con McLaren sería como una doble victoria para la firma alada. Todo ello aderezado por la batalla en la zona media. Imperdible.