La noche cerrada en el desierto de Bahréin sigue siendo un reclamo dentro del Mundial desde hace varios años. El circuito de Sakhir no ha hecho más que confirmar lo que se preveía en Australia. El Mundial es cosa de tres equipos, Mercedes, Ferrari y Red Bull. Sin embargo, la diferencia entre estas tres escuderías y la zona media es realmente preocupante, puesto que entre Lewis Hamilton y Pierre Gasly, tercero y cuarto respectivamente, era superior a los 55 segundos.
El mundo de la Fórmula 1 sigue recorriendo el planeta y llegamos a la primera parada del continente asiático. El trazado de Shanghái será la sede la tercera prueba del calendario, en un fin de semana en el que tendremos que estar atentos al estrés y al desgaste lateral de los neumáticos por las largas curvas a la derecha que hay en el trazado chino. Además, será la primera cita de la temporada en el que las fuerzas G serán un problema para los pilotos, puesto que se espera que en algunos puntos del circuito alcancen las 7G.
Ferrari intentará confirmar el paso adelante que han dado esta temporada. Los de Maranello es uno de los equipos que cuidan mejor los neumáticos, algo de lo que tiene que aprender mucho todavía en Mercedes. El equipo de la estrella tendrán que sobreponerse a los problemas que han tenido esta temporada. Por un lado los problemas de radio que tuvieron en Sakhir y por el otro la falta de adaptación a los posibles cambios que sucedan en el Gran Premio. Sin embargo, no todo es malo en Mercedes, puesto que las piezas que cambiaron tras el accidente de Valtteri Bottas en Australia, se ha podido comprobar tras un exhaustivo análisis que están en perfecto estado.
Por su parte, Red Bull tendrán que pasar página tras un debut del Mundial más problemático de lo esperado. El pasado Gran Premio la agresividad de Max Verstappen hizo que tuviera que retirarse antes de tiempo, mientras que un problema eléctrico hizo que Daniel Ricciardo tuviera que bajarse del monoplaza en los primeros compases de la carrera. Sin embargo, suerte distinta corren en el equipo satélite de la bebida energética. Toro Rosso fue la sorpresa del fin de semana tras mostrar una rápida adaptación al motor Honda y finalizar en cuarta plaza el Gran Premio. Por ello, desde el equipo de Faenza quieren comprobar que este hito es real y que no es un espejismo.
En el grupo de la zona media de la parrilla la cosa está que arde. Renault ha dado un paso adelante y ha confirmado que todo el esfuerzo que han hecho tiene sus frutos, por lo que intentarán lograr un buen resultado en China. Por su parte, en McLaren se respira mucha más calma y tranquilidad de la que había hace un año. El motivo es simple, el motor de la marca del rombo les permite tener una seguridad que no tenían con Honda. Los resultados que están obteniendo son realmente positivos. Sin embargo, todavía tienen mucho trabajo por delante, en especial en las sesiones de clasificación, puesto que no encuentran el ritmo a una vuelta que esperaban.
Desde el equipo de Vijay Mallya esperan poder seguir evolucionando en medio de su odisea financiera. En el pasado Gran Premio han podido pasar página de un inicio de Mundial un tanto convulso deportivamente hablando. En Force India parece haber encontrado el ritmo que necesitaban pero no sólo fueron ellos, sino que también en Sauber pudieron terminar en la zona de puntos en Sakhir. En ambos casos gran parte de este resultado fue gracias a la estrategia y algunas mejoras que llevaron que al parecer funcionaron a la perfección. Por su parte, en Williams están naufragando en todos los sentidos. Quizás sea debido a la inexperiencia de los pilotos pero los de Groove deberían estar arrepintiéndose de la situación actual de equipo. Su mayor quebradero de cabeza no es la escasez de resultados y la imagen que están dando, sino que están ingeniándoselas para garantizar su presencia en las próximas temporadas, puesto que no están pasando su mejor momento económico.
Desde la firma suministradora de neumáticos no han perdido el tiempo. Saben que el trazado de Shanghái es muy particular y ha sido la primera vez que ha ido un paso más allá con la elección de compuestos. Este fin de semana estarán presentes el compuesto ultrablando, el blando y el medio. La mayoría de los equipos han optado los compuestos ultrablandos y blandos.
El trazado de Shanghái no suele tener mucha actividad durante el año, por lo que es muy posible que el asfalto no tenga mucha goma. Además, al ser un trazado de stop and go, hace que los neumáticos sufran más de lo esperado, pese a que es un asfalto que no es muy abrasivo. En total se darán 56 giros hasta completar una distancia de carrera de 305.066km. El récord del circuito es de Michael Schumacher, datado en 2004, con un crono de 1:32.238. Un registro que dada la peculiar configuración de la pista china es muy probable que consigan rebajarlo.