El primer hypercar del desierto. Así ha presentado Prodrive las credenciales de su nuevo modelo de producción, el Hunter, el cual seguramente a muchos de vosotros os suena por es que el mismo nombre del T1 y del T1+ que ha competido durante las dos últimas ediciones del Rally Dakar junto a prestigiosos nombres como los de Sébastien Loeb, Nani Roma y Orly Terranova. Y la verdad es que estamos precisamente frente a todo un supercoche diseñado para devorar dunas y arena a toda velocidad, especialmente creado para los clientes de los Emiratos.
Uno de los eslóganes con los que Prodrive ha dado promoción al nuevo Hunter 4×4 es que cuenta con un “aumento de potencia del 50%”, llegando hasta los 600 CV y 700 Nm de Par Máximo gracias a la puesta a punto del motor V6 biturbo de 3.5 litros, aprovechando que en este caso el bloque que emplea el Hunter de calle no tiene que ceñirse al equilibrio de prestaciones que la FIA aplica a los coches que compiten dentro de la categoría T1+ y T1.U para igualar el rendimiento entre tecnologías de propulsión completamente distintas.
Esto también tiene incidencia evidentemente en la velocidad punta, ya que lejos de estar limitado a los 170 km/h como ocurre en la competición, Prodrive ha publicado sus estimaciones en cuanto a aceleración y velocidad máxima, capaz de completar según ellos el 0 a 100 km/h en menos de cuatro segundos y tener como techo los 300 km/h, cifras que seguramente sean muy complicadas de alcanzar con los neumáticos todoterreno con banda de rodadura muy anchas.
Tomamos la decisión deliberada de mantener el Hunter Hypercar lo más cerca posible del original. Se trata de dar a los propietarios la oportunidad de experimentar lo que es conducir el coche Dakar de Loeb por el desierto, pero con todas las comodidades de un coche de calle y la posibilidad de conducirlo desde su casa, a través de una ciudad, a cualquier destino de su elección – David Richards
También se ha ampliado el recorrido de suspensiones, aprovechando precisamente a que al no ser el BRX Hunter homologado bajo la normativa Clase T1+, también tienen que ceñirse a la respectiva reglamentación técnica. En cuanto al resto, ya lo conocemos. La carrocería, diseñada por el padre del Jaguar F-Type, Ian Callum, sigue siendo muy agresiva y mostrando líneas de un deportivo del desierto, con el diseñador británico regresando al trabajo para hacer también la configuración interior, mucho más recatada y menos espartana que la que se ve evidentemente en el coche de carreras.
No hay instrumentación de competición, ni roadbook digital, ni nada parecido, pero sí que llama la atención esa gran pantalla digital en la consola central que servirá para recoger toda la información relevante que necesite el conductor. Aquí, el principal cambio que podemos apreciar es que se ha sustituido esa gran palanca con la que se acciona el cambio secuencial en el Hunter T1+ y se ha instalado unas nuevas levas detrás del volante para la caja de seis velocidades que monta el vehículo de calle.
Se deja abierta la posibilidad a reducir el depósito de combustible, el cual en los rally-raids llega hasta una capacidad de 480 litros y así se deja espacio para el equipaje, dejándonos la duda de si se ha aprovechado ese espacio que dejan libre el no contar con las dos ruedas de repuesto en los laterales.
Hay numerosos hipercoches en el mercado, sin embargo, todos necesitan buenos caminos o incluso pistas de carreras para mostrar su rendimiento. Identificamos que, en ciertas partes del mundo, particularmente en el Medio Oriente, existen vastas extensiones por explorar que van mucho más allá del acceso que brindan las carreteras asfaltadas. Por lo tanto, ¿por qué no crear un vehículo que brinde la oportunidad de explorar estas regiones con un rendimiento mucho mayor que el ofrecido por cualquier vehículo todoterreno anterior? – David Richards
En cuanto al resto de elementos, prácticamente todo se mantiene respecto a lo visto en su versión de carreras, comenzando por el chasis y la jaula de seguridad y terminando con las suspensiones de doble horquilla con amortiguadores dobles regulables que van hasta los 400 mm de recorrido en lugar de los 350 mm del T1+. Los frenos cuentas con pinzas de seis pistones y discos de freno ventilados.
Por ahora, la primera versión del Prodrive Hunter se encuentra haciendo una gira por Medio Oriente, y la primera unidad será para el Príncipe Salman bin Hamad Al Khalifa de Bahrein, algo que demuestra una vez más cuál es el mercado al que va destinado. Únicamente se espera una tirada de veinte unidades, por lo que, si tienes el dinero y el deseo, puede que tengas que correr para hacerte con una de ellas. El precio es 1,25 millones de libras esterlinas, millón y medio de euros al cambio, más impuestos locales…