Para los que seguimos el Rally Dakar año tras año desde que tenemos prácticamente uso de razón, se ha hecho muy extraño el ver las tablas de tiempos y no encontrarnos a Stéphane Peterhansel. Monsieur Dakar sin embargo se ha dado el gustazo en su papel de embajador de Yamaha de llegar a Lago Rosa en el mes de enero en un ‘viaje’ que no realizaba desde el año 2007, última edición de la prueba organizada por ASO sobre suelo africano.
Ahora la pregunta es la de todos los años: ¿Habrá sido la última vez que hemos visto competir a Peterhansel? A sus 59 años, 60 el próximo mes de agosto, Stéphane sigue teniendo un profundo amor por las carreras y los retos, por lo que para nada ha sido una sorpresa saber que según la información de Enrique Naranjo en el Diario MARCA, se trata de uno de los nombres que está siendo relacionado con el proyecto de Jaguar Land Rover para competir con tres Defender de fábrica en el próximo Dakar 2026 dentro de la categoría Stock, o lo que antiguamente se conocía como los T2.
Esta clase, que para el próximo mes de enero estrenará nueva reglamentación con el objetivo de atraer a más fabricantes que la propia JLR y Toyota, podría tener la oportunidad perfecta para cobrar aún más protagonismo durante la carrera al contar con todo un 14 veces ganador del Rally Dakar entre sus filas, algo que también encajaría con las primeras palabras por parte de la estructura cuando fue preguntada acerca de quiénes serían sus pilotos.
Opciones desde luego no les faltaría y si bien se dice que también estarían interesados en incluir a una piloto fémina dentro de su alineación, ya han destacado que el objetivo principal será el de contar con pilotos con experiencia. El mercado desde luego parece haberse abierto de par en par ya que no sólo Peterhansel estaría disponible, sino que otros pilotos como Giniel de Villiers también es sabido que ha terminado su relación con Toyota después de la edición del Dakar de este año.
También se ha dejado ver Petter Solberg por el Dakar 2025, siguiendo la carrera en el vivac y desde el helicóptero, siendo el noruego ya relacionado previamente con este nuevo proyecto de fábrica con los Defender, especialmente después de haber disputado una prueba en Reino Unido con la montura protagonista de su propia copa monomarca. Incluso Dani Sordo dijo hace unos meses a mi compañero Jesús Muñoz que se encontraba en conversaciones con Prodrive para un futuro en los rally-raids… curiosamente, los de David Richards serán los encargados de desarrollar estos Defender derivados de la serie.
En un momento en el que se está hablando mucho de la seguridad, especialmente tras las exclusiones de Laia Sanz, Carlos Sainz y Sébastien Loeb tras doblar las jaulas o después de los abandonos de Toby Price y Giniel de Villiers por problemas físicos de sus copilotos, todo parece indicar que los actuales prototipos de la categoría Ultimate han llegado ya muy lejos y que, aunque se limite su velocidad máxima a 170 km/h por reglamento, siguen llevando los cuerpos al límite de los competidores. Quizás el regreso hacia una normativa con coches más lentos y más de serie pueda ser el camino para el futuro de un Dakar al que la apuesta por el hidrógeno parece alejarse cada día más.
Vía | MARCA
