Ha estado esperando toda una vida a este momento. Lejos queda aquella temporada en la que un joven belga deslumbró a todos por su pilotaje agresivo en todas las superficies dentro de la temporada del Intercontinental Rally Challenge. El Peugeot 207 S2000 de Thierry Neuville con esa llamativa decoración en honor al apoyo por parte de la Federación de su país y de la filial del grupo PSA en el Benelux dejó su impronta con actuaciones como la vista en la Golden Stage del Rally de Chipre, y aunque no consiguió el título del IRC, sí que se ganó el pasar a ser tenido en cuenta para saltar al Campeonato del Mundo de Rallyes.
Citroën, Ford y finalmente Hyundai vieron cómo Thierry Neuville siguió creciendo, tonteando los primeros años con la victoria, viendo a Dani Sordo ganar aquel Rally de Alemania 2013 desde el segundo cajón del podio y teniendo que esperar un año más, precisamente también en la prueba teutona, para conseguir el primero de sus triunfos en la categoría absoluta del WRC. 10 años después Neuville está ya acariciando con los dedos su primer entorchado intercontinental, ahora copilotado por Martijn Wydaeghe en lugar de Nicolas Gilsoul, pero con una filosofía similar que le ha llevado a mantener ese espíritu combativo durante toda su carrera deportiva.
Cinco subcampeonatos del Mundo atesora Neuville y varios terceros puestos. Escaso consuelo para un piloto que ha demostrado se capaz de ser tan rápido como el que más en sus mejores días, pero al que le ha pasado mucha factura siempre su irregularidad y los errores en momentos clave de la temporada que han tirado por tierra sus opciones de dar el siguiente paso y subirse a lo más alto. Con el objetivo de llegar a la próxima Gala de la FIA a recoger su título mundialista, Thierry vivirá este fin de semana su segunda oportunidad de dejar completamente sentenciada la lucha.
¿Qué necesita Thierry Neuville para ser campeón?
Las cuentas parecen claras. Actualmente tiene 29 puntos más que Ott Tänak, 41 puntos más que Sébastien Ogier y 46 más que Elfyn Evans. Adrien Fourmaux, con su resultado en Chile quedó fuera de la ecuación, un cálculo matemático que nos dice que, si Neuville no pierde más de 10 puntos con Ogier, 16 respecto a Evans y si además logra dos puntos extra en su colchón sobre su compañero, el campeón del Mundo de 2019, entonces será matemáticamente campeón del WRC 2024.
La cifra referencia siempre será los 31 puntos con los que debería contar al finalizar el Rally de Centroeuropa, sin embargo, esta cifra podría ser incluso de únicamente 30 si consigue Neuville ganar su tercera prueba del año y Ott Tänak no suma un nuevo éxito. El único de los cuatro pilotos de cabeza que tiene más triunfos que Thierry a estas alturas de la temporada es Sébastien Ogier, por lo que, si Tänak o Evans (Elfyn no ha ganado hasta el momento, por lo que su situación es todavía más límite) no logran sumar un triunfo, entonces para ellos la cifra referencia pasará a ser la de 30 y no la de 31.
Con el anterior sistema de puntuación la cuenta resultaba mucho más sencilla, sin embargo, ahora habrá que esperar a ver cómo se reparten los puntos del Super Sunday y de la Power Stage, sin importar casi lo que pueda suceder hasta el sábado. Si cualquiera de los tres termina a menos de 30 puntos esta penúltima fecha del Mundial, el Mundial pasará a decidirse en el Rally de Japón el fin de semana del 21 al 24 de noviembre.
