Los riesgos siempre son entretenidos, ¿no? ¿Acaso no es más interesante optar por una opción en la vida propia sin saber del todo si el resultado va a ser el deseado o no? Claro, nadie queremos tomar riesgos si podemos evitarlo… pero a veces, si uno quiere un resultado especial, debe actuar con cierto porcentaje de riesgo, de inseguridad. Debe tomar acciones que pueden salir muy bien, pero ¡ay, si salen mal! Esto podría aplicarse a los tres grandes equipos de la Fórmula 1, los tres primeros clasificados del Campeonato de Constructores en 2021. Sus filosofías de trabajo para este 2022 han sido distintas, cada uno tomando sus riesgos, algunos más y otros menos. También toma riesgos quien escribe estas líneas, al atreverse a hablar, aunque sea solo un poco, de cómo va a ir el campeonato. Vamos allá, ¿no?
Al final, está claro que los tres equipos con mayor solera en la Fórmula 1 actual quieren ser campeones, pero solo uno lo puede lograr. ¿Cuál de ellos será? ¡Imposible de saber! Pero Àlex, dirán algunos, ¿no acabas de decir que vas a tomar riesgos y decir lo que va a pasar en 2022? Claro, sí. Pero que no falte el disclaimer en el que se deja claro que todo esto no deja de ser una opinión. Basada en hechos y sensaciones, sí. Pero opinión a fin de cuentas. Esto no hay que olvidarlo nunca. Lo que sí está claro es que con tres días de test completados y otros tres por completar, ahora sí que empieza a haber algunos detalles algo más empíricos en los que centrarse.
Por lo pronto, en la jornada de hoy Mercedes metió miedo a sus rivales con unos grandes tiempos en los últimos minutos de la última sesión de toda la pretemporada barcelonesa. Russell ya había sido el más rápido por la mañana y parecía que nadie iba a batir sus tiempos. Entonces llegó Hamilton con los neumáticos C4, los segundos más blandos de los cinco disponibles, y destrozó el cronómetro. Casi una décima más rápido pero con un compuesto más duro que el de su joven compañero. Un tiempazo, vamos. Y con gomas C5 habría podido bajar al 1:18. De hecho, los mejores sectores dan como mejor tiempo absoluto un 1:18.6 que luego Hamilton no replicó en su vuelta con dichos neumáticos… porque levantó el pie en el último sector.
No nos escondemos. Mercedes va bien. Serán candidatos al título indudablemente. Serán más o menos dominantes, pero ganarán carreras y pelearán por el campeonato. Que nadie lo dude. Por algo han sido los dominadores a largo de casi una década y con ocho años ganando, uno no se olvida de construir coches de golpe. Con dos pilotos como Hamilton y Russell, serán una fuerza muy imponente. Y sin embargo, no son los únicos que han dado muy buenas sensaciones… aunque sí son los únicos que han mandado un mensaje realmente potente en esta primera semana de pretemporada 2022.
El «caso Ferrari» es un caso de estudio sobre la fe y la confianza. En algunos casos, por la fe ciega de los tifosi y la confianza en que ‘este año sí’… temporada tras temporada. En otros, porque incluso cuando realmente van bien, es difícil fiarse de lo que uno tiene delante de los ojos. Debe haber algo mal, seguro que hay alguna cosa que no estamos viendo, esto no cuadra del todo… dejémonos de tonterías. Aún sin saber realmente cómo está cada uno de los equipos, lo que no se puede negar es que Ferrari ha rodado más que nadie, con más de 2000 kilómetros en tres días. Casi siete distancias de Gran Premio y sin un solo problema técnico. Casi nada.
Un detalle que ha pasado desapercibido es el de cómo los de Maranello ni siquiera han montado los neumáticos C4 o C5. De hecho, son los únicos que no han utilizado las gomas más blandas entre los equipos medianamente competitivos y la experiencia nos dice que cuando un equipo no lo ha hecho en la primera semana de pruebas… es porque iban sobrados (Mercedes ha sido experta en hacer esto). Sus tiempos con los neumáticos C3 (recordemos, los únicos que van a estar en TODAS las carreras del mundial) parecen ser competitivos, por norma general. Está claro que tanto ellos como sus rivales se están escondiendo, pero esa es una percepción basada en los números y en los datos.
¿Y la percepción cualitativa? Esta es excelente, de hecho. Las caras en el espacio de Ferrari son un poema. Confianza, felicidad, alegría… más que otros años, desde luego. Que si después no van bien, no quiero quejas, ¿eh? Pero el ‘feeling’ que da Ferrari es que ahora sí que han encontrado algo que les hace estar en una buena posición de cara al Campeonato del Mundo. Difícil saber si a la altura de Mercedes o si por delante de Red Bull. Pero… estarán mejor que el año pasado y que en 2020. Incluso mejor que en 2019, me atrevo a decir. Sería una sorpresa si los coches rojos no fueran protagonistas este 2022.
¿Y Red Bull? Realmente, el equipo de la marca de bebidas energéticas ha tenido momentos de brillantez en esta pretemporada. En algunos ‘runs’ concretros se les ha visto competitivos, rápidos y sobre todo, parece que sin llegar a forzar nunca la maquinaria. Esto haría pensar que si no han estado más arriba en las tablas de tiempo, es porque no les ha sido necesario apretar las tuercas del motor Honda -perdón, Red Bull Powertrains- que llevan debajo del capó. Suya es la intriga de los tres equipos que deberían pelear por el mundial, pero algo me dice que en Bahréin les veremos demostrar algo más de rendimiento antes de llegar a la primera carrera del año como una fuerza a tener en cuenta.
McLaren ha generado ciertas dudas, ante todo porque están yendo generalmente bastante bien pero sin la solvencia aparente de los tres equipos que ponemos por delante. Sería lógico esperar que el equipo de Woking se mantenga en una cuarta posición en el orden establecido que en un momento dado le pueda permitir dar algún susto y, sobre todo, reaccionar para subir en la escalera si llega la oportunidad. Después, debería haber un pequeño salto hacia el gran laberinto de la zona media. Es difícil ver si Aston Martin sacará la cabeza por encima de los demás, o si por el contrario quizás lo haga AlphaTauri. Incluso Williams ha dado buenas sensaciones también. Estos tres equipos han estado en buena forma esta semana, aunque es innegable que el riesgo de que hayan ocultado menos su rendimiento por motivos comerciales también existe.
Por último, tres equipos han tenido más problemas. Aunque es injusto meterle en el grupo colero y de hecho no le consideraría como tal, Alpine ha terminado la semana de test de la peor forma posible, con problemas técnicos que les han dejado fuera de combate el último día. También le pasó a otros equipos como Aston Martin, pero es que Alpine no llegó a mostrar buen rendimiento en ningún momento y en todo caso, parece ser que la mecánica falló en el único momento en el que se empezó a apretar ‘algo’ las tuercas. Mala señal, desde luego, tanto por velocidad como por fiabilidad. Quienes sí estarán en el agujero negro de la zona baja, deben ser Haas y en mayor medida, Alfa Romeo. Siendo justos, estos últimos dan la sensación de no estar aún listos, simplemente, mientras en Haas quizás están algo mejor que en 2021.
Pero claro, todo esto son elucubraciones. Riesgos que uno toma a la hora de hablar. Esto es lo que puede pasar, visto lo visto en Barcelona. En dos semanas, veremos más cosas… aunque esta vez, desde la distancia. ¡Buenas noches!