Tal y como se esperaba antes del inicio del Rally Dakar, la decisión de tener un EoT variable a lo largo de la carrera iba a generar a la fuerza un conflicto. Así ha sido, y a pesar de que Nasser Al-Attiyah tenía una sólida ventaja al frente de la general llegados a esa quinta etapa de ayer, el qatarí, al igual que su copiloto, Mathieu Baumel, no pudieron evitar hacer declaraciones en sus redes sociales ante lo que consideraban que era “matar la carrera temprano” al darle esos 11 CV de potencia extra a los Audi.
Sin embargo, esta situación se había dado a pesar de un pacto al que habían llegado los equipos con ASO/FIA para que no se hicieran declaraciones por parte de los distintos actores ante cualquier ajuste del EoT que se pudiera hacer durante la carrera, algo que recalcó la propia FIA ayer cuando lanzaron su comunicado para explicar las razones de esa variación de 8 kW más que se le permitían emplear a los tres RS Q e-tron E2: “el ajuste de Equivalencia de Tecnología forma parte de las regulaciones deportivas de los Rallyes Cross-Country”.
El proceso final de equivalencia de tecnología fue aprobado por todos los fabricantes. Los datos de las etapas 1, 2 y 3 mostraron una diferencia a favor de los T1+ en torno a los 9,3 kW. El comité del W2RC decidió de acuerdo con el reglamento conceder un aumento de potencia para los T1.U a partir de la etapa 5 – Comunicado de la FIA
La victoria de Nasser Al-Attiyah ayer puede tener sin embargo dos visiones: la que le da él, en una absoluta muestra de rabia y coraje que le permitieron sacar toda su calidad como piloto y llevarse el triunfo en esa etapa de 373 kilómetros competitivos en Ha’il, o la de que le pueden dar otros interesados al apuntar que, a pesar de dicho ajuste de potencia, la Toyota GR DKR Hilux T1+ del qatarí sigue siendo superior al resto.
Ayer Nasser fue preguntado acerca de una posible sanción por romper esa ley del silencio instaurada entre bambalinas y que recuerda mucho a la que también ha introducido ‘oficialmente’ y a través del Consejo Mundial del Motor el WEC de cara a este 2023 en relación al BoP, pero el cuatro veces ganador del Dakar y vigente Campeón del W2RC prefirió tirar balones fuera: «No, acabo de publicar lo que sucedió. Esto viene de la organización (en referencia al documento, no al texto que lo acompañaba) y lo publicamos, es normal, todo el mundo lo publica».
La realidad es que, todo este asunto fue informado a comisarios por parte de la FIA, incluyendo las publicaciones realizadas por Mathieu Baumel y Nasser Al-Attiyah (desconocemos si también las respuestas de Ekström y Sven Quandt), ambas fueron eliminadas por sus autores a petición de la dirección del equipo Toyota GAZOO Racing South Africa tal y como informó ayer el Diario MARCA. Quandt también había hecho lo propio unas horas antes con su reacción al post de Instagram de Nasser tal y como comentábamos en nuestra publicación ayer.
En principio, parece difícil creer que la FIA vaya a castigar con dureza las declaraciones de Nasser Al-Attiyah, especialmente después de cambiar el tono de sus afirmaciones a lo largo del día posterior, sin embargo, no deja de ser susceptible a que recaiga sobre él algún tipo de sanción deportiva, que evidentemente, en el caso más extremo podría incluso significar una descalificación en caso de que la situación se desmadre. Por su parte, Mathieu Baumel también ha reaccionado en redes sociales y se ha disculpado, asegurando que reacción «en el calor del momento» y que «ahora entiendo mejor la situación y pido disculpas por mi mensaje anterior».