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Rally Dakar 2023: ¿Por qué usar un reloj le puede costar la descalificación a un piloto?

Si ya la posible sanción a Carlos Sainz por la situación en que su hijo le cerró la puerta después de las reparaciones que tuvieron que acometer durante la etapa 3 pudo despertar alguna que otra sonrisa, lo sucedido también tras la etapa del miércoles con el equipo competidor de T4 en el que figuran Yasir Seaidan como piloto y Alexei Kuzmich como copiloto. Tras la jornada competitiva, los comisarios anunciaron una sanción de 30 minutos aplicada en la cuarta etapa y la decisión por el momento suspendida de descalificarles. ¿La razón? El copiloto había utilizado un reloj durante la competición.

Este hecho tan particular no es algo tan descabellado como puede parecer. En este caso, Kuzmich se encontraba empleando un reloj que no pertenecía a la marca oficial del Rally Dakar, Rebellion Watches, la cual también podemos encontrar en otros campeonatos FIA como el World RX. El empleo de un reloj no aprobado aparece sin ir más lejos en el reglamento deportivo del Campeonato del Mundo de Rally-Raids, más concretamente en el apartado del equipamiento, dentro del artículo 9.1.6, en el que se hace referencia que “No se permiten relojes de ningún tipo en el vehículo de competición, a excepción del modelo facilitado por el organizador”.

Hablamos concretamente del Dakar Watch Rebellion Edition, un modelo que es entregado a los participantes de la prueba para que sea utilizado para las habituales labores de un copiloto, como es el cronometraje o el controlar los distintos tiempos obligatorios, como puede ser el de la entrada al control horarios, así como el tiempo máximo disponible para las tareas en el vivac.

¿Por qué no se permite otra marca? Con la evolución de la tecnología, los smartwatches se han convertido en potenciales elementos electrónicos capaces de hacer funciones similares a las de un smartphone, por lo que la organización, en una prueba como es el Rally Dakar, en la que la navegación es clave, decide restringir la utilización de estos elementos y sólo permiten el uso del Dakar Edition porque se trata a fin de cuentas de un reloj analógico.

La sanción es muy dura evidentemente, no sólo por la media hora perdida, sino también porque sobre sus cabezas se dispone la posibilidad de descalificación en caso de que se produzca una violación de reglamento similar durante el resto de la prueba. Kuzmich se ha defendido asegurando que pensó que se trataba simplemente de un regalo y siguió empleando el suyo propio, todo ello a pesar de que el propio Director de Carrera, Pedro Almeida, lo recordó un día antes de la disputar de la etapa prólogo el pasado 31 de diciembre.

Decisión de los comisarios – Yasir Seaidan/Alexey Kuzmich

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Iván Fernández

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