Estábamos expectantes de lo que nos depararía esta segunda jornada del Rally de Gales 2018, un día que estaba marcado por ser la etapa más larga de la prueba británica y además no contar con asistencia intermedia, únicamente 15 minutos para sustituir neumáticos por los del segundo bucle. Esto hacía especialmente interesante la batalla por el título, después de ver cómo Sébastien Ogier se libraba del abandono en la jornada de ayer tras perder dos marchas de su caja de cambios en el primer bucle, algo que lograrían solventar en la asistencia al sustituir por un elemento nuevo. Por tanto, no había comodines, al que cometiera un error le podía costar un Mundial.
Con esto en mente salían los pilotos a la sección matinal, conociendo ya Ogier que se quedaba sin el apoyo de uno de los pilotos de M-Sport, Teemu Suninen, el cual abandonaba definitivamente después de que de la salida de pista sufrida en el último tramo del viernes se descubriera que la jaula de seguridad había quedado afectada. La primera pasada por los 20,28 kilómetros de Myherin se salvaban sin problemas por los cabezas de cartel, en unos tramos empapados por las lluvias que habían azotado durante gran parte de la noche y que habían dejado al oscuro barro galés con ese brillo que advierte con solo mirarlo de su poco agarre.
Para entonces, el par de Toyota que cubría las espaldas a Tänak cedía ante el empuje del francés, el cual llegaba desde la quinta posición para situarse tercero después del que era su primer scratch del rally. El francés, copilotado por Julien Ingrassia, contenía los daños después del susto de ayer, aunque el verdadero golpe de efecto se daba solo unos kilómetros más tarde, cuando Thierry Neuville sufría una salida de pista en el icónico tramo de Sweet Lamb, este año fusionado con Hafren.
El belga perdía la trasera del Hyundai i20 WRC Coupé en una curva de derechas con poco agarre y se quedaba empanzado en la cuneta. Inmediatamente Nicolas Gilsoul abría la puerta y solicitaba a gritos de forma desesperada la ayuda a los aficionados allí presente. Los segundos pasaban, pero afortunadamente las praderas británicas se volvieron a llenar de incondicionales que no dudaron en saltar a rescatar a la pareja belga del lío en el que Thierry reconocía que se había metido él solo. Más de 50 segundos perdidos, la aerodinámica trasera del Hyundai completamente destrozada (recordemos que no había asistencia) y el cosquilleo en la espalda de que se había podido haber escapado el Mundial en ese kilómetro.
Tenía que llegar en algún momento, especialmente cuando estás conduciendo al límite desde principios de año. Es mi primer error en el que me he quedado atascado desde Monte-Carlo. Fue mi culpa. Salimos con el neumático medio en el eje delantero, nos sorprendió el agarre y nos fuimos fuera. No nos rendiremos.
Sébastien Ogier obviamente aprovechaba el error de su rival para situarse a espaldas de Ott Tänak, mientras que Neuville caería hasta la séptima plaza, rodeado por sus dos compañeros de equipo. Andreas Mikkelsen si cabe ahondaba más en la crisis de los líderes del WRC 2018 cuando en el TC13, Gartheiniog, conseguía el scratch y relegaba a Neuville a la octava posición. En las posiciones de cabeza, Ogier se encontraba a 48 segundos de Tänak, con Latvala y Lappi situados a sus espaldas, ambos a menos de cinco segundos del pentacampeón y listos para presionar al de M-Sport al que puede que no le valga tampoco la segunda plaza ante la racha de Tänak.
Ante la pregunta de cómo afrontaría el resto de la jornada, Ott apuntaba: “tengo mi trabajo por hacer y los otros tíos (sus compañeros) tienen que hacer el suyo. La tarde será difícil, especialmente si estas pistas se limpian aún más. Va a estar deslizante como el infierno”. Con el estonio y su copiloto Martin Järveoja con una solida ventaja, todas las miradas se centran ver cómo se reparten el resto de posiciones del podio, mientras que Hyundai tiene la posibilidad de emplear órdenes de equipo para que tanto Paddon como Mikkelsen dejen pasar a su jefe de filas. Algo más complicado le resultará a Thierry dar caza a los Citroën, posibles jueces del campeonato, los cuales se sitúan a 24 segundos en el caso de Ostberg y más de medio minuto en el de Breen.
Lo que queda claro es que el golpe al Mundial de Constructores puede tener tintes dramáticos en el caso de Hyundai Motorsport, marca que cedía el liderato tras Turquía y que aquí está viendo que sus principales rivales tienen a sus tres coches entre los cuatro primeros (a retener los dos mejores resultados). En WRC2, de nuevo Solans tenía que abandonar en el kilómetro 2 del TC12, mientras que Kalle Rovanperä sigue consolidando la que puede ser su segunda victoria en la categoría, ya con un minuto de renta sobre Tidemand.
Clasificación del Rally de Gales 2018 tras TC14:
Pos | Piloto | Copiloto | Coche | Tiempo | Dif. 1º |
1. | O. Tänak | M. Järveoja | Toyota Yaris WRC | 1:50:53.2 | |
2. | S. Ogier | J. Ingrassia | Ford Fiesta WRC | 1:51:41.2 | +48.0 |
3. | J. Latvala | M. Anttila | Toyota Yaris WRC | 1:51:42.9 | +49.7 |
4. | E. Lappi | J. Ferm | Toyota Yaris WRC | 1:51:45.4 | +52.2 |
5. | C. Breen | S. Martin | Citroën C3 WRC | 1:51:48.6 | +55.4 |
6. | M. Ostberg | T. Eriksen | Citroën C3 WRC | 1:52:01.3 | +1:08.1 |
7. | H. Paddon | S. Marshall | Hyundai i20 WRC | 1:52:16.2 | +1:23.0 |
8. | A. Mikkelsen | A. Jaeger | Hyundai i20 WRC | 1:52:24.0 | +1:30.8 |
9. | T. Neuville | N. Gilsoul | Hyundai i20 WRC | 1:52:25.6 | +1:32.4 |
10. | K. Rovanperä | J. Halttunen | Skoda Fabia R5 | 1:56:56.5 | +6:03.3 |