Se cumplieron los pronósticos, incluidos aquellos que apuntaban a que sin lluvia, Sébastien Ogier iba a ser el principal damnificado en esta primera etapa completa del Rally de Italia-Cerdeña. No solo el francés ha sufrido un inicio lento en las polvorientas pistas de la isla mediterránea, sino que Thierry Neuville, otro de los grandes candidatos al título este año, se hundía en la general nada más comenzar en una jornada en la que los pilotos secundarios han tomado la iniciativa.
Con 124,2 kilómetros cronometrados por delante, incluyendo tramos ya más que conocidos como Tula, Castelsardo o Monte Baranta, era importante realizar las montas correctas para las pasadas del primer bucle. En ese momento, Sébastien Ogier se desmarcaba del resto y montaba tres de compuesto duro y dos del medio, buscando realizar las montas mixtas de las que ya os hablamos durante el previo (también Tänak y Meeke realizaban una elección mixta), mientras que Lappi, Sordo, Evans y Suninen y Hänninen se centraban en cinco duros y Neuville sorprendía con seis medios. La organización permitía 3 minutos de diferencia entre los pilotos, por lo que se ponía solución a un problema que ya pudimos ver en Portugal que podía ser decisivo.
La estrategia le funcionaba en un primer momento a Thierry Neuville. El belga, saliendo desde el tercer lugar en el orden de salida se encontraba los tramos en ligeras mejores condiciones que Tänak u Ogier, sin embargo, su opción de mixtos ser iría tornando en menos competitiva con el paso de los kilómetros, más si tenemos en cuenta que era de los pocos que llevaba los 20 kilos extra de una rueda más de repuestos, algo que hacía que el Hyundai i20 WRC se fuera moviendo en todo momento, una constante en las declaraciones de los pilotos del equipo, asegurando que la zaga se movía mucho.
Tampoco los que optaban por el duro estaban del todo contento. Jari-Matti Latvala reconocía que en la sección más estrecha del primer tramo se estaba dejando demasiado tiempo y que era realmente complicado mantener el coche dentro del camino. Aun así, los tiempos del finlandés eran competitivos, comenzando en este caso una batalla personal con su compatriota, Teemu Suninen, Elfyn Evans, Dani Sordo y el propio Ott Tänak. Curiosamente, el estonio, segundo del mundial, era el piloto de punta que menos tiempo cedía tras los dos tramos, manteniéndose a un rango de apenas 16,4 segundos.
Los dos pilotos nórdicos se ponían a tirar al frente de la general, liderada provisionalmente por Teemu Suninen y en la que Esapekka Lappi ya poco tenían que decir a partir del cuarto tramo. Uno de los pilotos más cuestionados actualmente cedía terreno después de desllantar en el penúltimo tramo de la mañana. El piloto de Citroën, que ya se había quejado de los problemas que tenía para hacer girar el C3 WRC, cedía más de 46 segundos con el rally recién iniciado y tras un error propio que él mismo reconocía abiertamente. También Sordo pinchaba uno de sus neumáticos en el TC2, lo que le condicionaría a nivel de pilotaje el resto de la mañana.
Aun así, la mayor de las sorpresas llegaría en el último tramo del bucle. Con Sébastien Ogier abriendo pista en una de las secciones que se empleaba para el tramo del shakedown que él mismo ganó, el hexacampeón se ceñía demasiado en una curva de izquierdas y se encontraba con una de las rocas situadas por la organización para que los competidores no cortaran. Como resultado, dirección rota y la necesidad de detenerse a un lado para tratar de reparar y penalizar lo menos posible, sabedores de que por delante tiene todavía otros cuatro tramos por la tarde que le hubieran reportado un gran saco de segundos en el reenganche por Rally2. Un golpe para el campeonato si tenemos en cuenta que en las dos próximas pruebas el factor de abrir pista será mucho menor y que la racha de podios de Ogier ya duraba desde México.
Ya sin el de Gap y Julien Ingrassia, Ott Tänak tenía que abrir pista, aunque con la inercia positiva poco parecía importar al estonio el tener que barrer el resto del tramo, superando a Teemu Suninen en la general y situándose a espaldas de su compañero de equipo, Jari-Matti Latvala. El líder del equipo Toyota GAZOO Racing ya sabe lo que es ganar en la isla sarda, y con los tramos ya barridos, su desventaja por el factor de apertura de pista será menor por la tarde.
A espaldas de los dos pilotos de Toyota se situaba Dani Sordo, a 3,5 segundos de Latvala, sabedor de que tiene ritmo en estos momentos para plantar cara a los Yaris WRC. Completaban el Top5 Elfyn Evans y Teemu Suninen, este último pasaba de ser líder con 10,6 segundos de ventaja a estar fuera del podio después de un trompo y problemas técnicos. A pesar de ello, los ocho primeros coches están en menos de 20 segundos, por lo que hay mucho margen para que se produzcan muchos cambios de posiciones.
Esapekka Lappi se quitaba el mal sabor de boca con el scratch en el TC5, algo que no le permitía ganar posiciones, pero que le dejaba a 43 segundos de la cabeza. Juho Hänninen por su parte seguía probando cosas nuevas para el Toyota, sacando partido en este caso a las zonas grises del reglamento de test y con una actuación que le permite estará a 5,3 segundos del primer y único Citroën clasificado.
En WRC2 Pro, la batalla quedaba muy pronto decidida. Mads Ostberg tenía que parar en el primer tramo del día por problemas en su Citroën C3 R5 (rompía el brazo que estabiliza la suspensión), mientras que Gus Greensmith repetía el resultado de Portugal y se salía de pista en la tercera especial. Con Pieniazek fuera de M-Sport hasta encontrar el presupuesto necesario, los dos Skoda Fabia R5 oficiales se quedaban en solitario al frente de la prueba.
Entre los pilotos del WRC2 para privados, Pierre-Louis Loubet ha tomado la delantera después de que Ole-Christian Veiby tuviera que volver a abandonar ayer por un defecto en la suspensión del Volkswagen Polo GTI R5. El noruego, gran candidato al título cedía aún más terreno, mientras que el francés, ganador en Portugal, empieza a ver cómo su temporada se reconduce. Nil Solans es sexto en dicha categoría, a 37 segundos del francés que mantiene un bonito duelo con un Takamoto Katsuta crecido en los últimos rallyes. A falta de un tramo también para completar el bucle, Jan Solans es tercero en JWRC por detrás del rumano Raul Badiu y del letón Martin Sesks.
Clasificación del Rally de Italia-Cerdeña 2019 tras TC5:
Pos | Piloto | Copiloto | Coche | Tiempo | Dif.1º |
1. | J. Latvala | M. Anttila | Toyota Yaris WRC | 49:38.6 | |
2. | O. Tänak | M. Järveoja | Toyota Yaris WRC | 49:41.4 | +2.8 |
3. | D. Sordo | C. Del Barrio | Hyundai i20 WRC | 49:42.1 | +3.5 |
4. | E. Evans | S. Martin | Ford Fiesta WRC | 49:44.5 | +5.9 |
5. | T. Suninen | J. Lehtinen | Ford Fiesta WRC | 49:46.3 | +7.7 |
6. | T. Neuville | N. Gilsoul | Hyundai i20 WRC | 49:52.7 | +14.1 |
7. | A. Mikkelsen | A. Jaeger | Hyundai i20 WRC | 49:55.3 | +16.7 |
8. | K. Meeke | S. Marshall | Toyota Yaris WRC | 49:57.7 | +19.1 |
9. | E. Lappi | J. Ferm | Citroën C3 WRC | 50:21.6 | +43.0 |
10. | J. Hänninen | T. Tuominen | Toyota Yaris WRC | 50:26.9 | +48.3 |