Rally de Estonia 2021: Kalle Rovanperä borda el ataque que le acerca a hacer historia

Después de la criba de la etapa del viernes en el Rally de Estonia, todos los ojos se centraban en ver qué iba a hacer Kalle Rovanperä con su liderato en este primer bucle del sábado, si el finlandés iba a salir a contener a Craig Breen o si la decisión iba a ser la de atacar desde la primera especial con el objetivo de ampliar diferencias. No íbamos a tardar demasiado en saber la respuesta. El finés salía con la pólvora cargada al tramo de Peipsiääre, aprovechando que los 23,53 kilómetros de la especial (inédita al no estar presente en la edición del año pasado) iban a ser un terreno propicio para marcar diferencias.

Recorrido estrecho, muy blando y con secciones muy técnicas. Rovanperä iba a sacarse de la manga una de sus mejores actuaciones en los apenas 14 rallyes en los que ha competido en el Mundial al volante del Toyota Yaris WRC. Lejos de las tres pruebas que necesitó Esapekka Lappi para conseguir su primera victoria en Finlandia con el coche nipón, pero dando buena muestra de que su progreso no ha quedado estancado a pesar de los sinsabores vividos desde que tomara por primera vez el liderato del Mundial tras el pasado Arctic Rally.

No fue de extrañar que, a la llegada a la meta, Craig Breen reaccionara de forma sorprendente en sus declaraciones al conocer el Split en su contra que estaba realizando Rovanperä: “Ese hombrecito está en el coche con más frecuencia que yo. Honestamente, hice una especial perfecta, si es 8 segundos más rápido, puede lograrlo”. El irlandés que está también persiguiendo su primer triunfo en la categoría absoluta se veía sorprendido por el gran ataque realizado por el finés, el cual extendía su ventaja en otros 14,3 segundos hasta situarla en unos 22,8 segundos entre ambos, lo que significaba una renta aún mayor que la que había obtenido en los nueve tramos anteriores a pesar de haber acumulado siete scratchs.

No conseguiría aumentar la cuenta en la siguiente especial, únicamente porque Ott Tänak iba a evitarlo como forma de quitarse ligeramente el mal sabor de boca que le dejó el abandono de ayer al piloto de Hyundai Motorsport. Tendrán difícil añadir una estrella más a las hombreras que lucen los monos ignífugos de los pilotos oficiales esta temporada, destacando los dos títulos de constructores conseguidos en las dos últimas temporadas, especialmente si se mantiene el resultado, con Rovanperä en la primera plaza y Sébastien Ogier en la cuarta.

Desde el equipo dirigido por Andrea Adamo se optaría por aplicar estrategias, optando porque Ott Tänak se saltara su orden de salida asignado tras Gus Greensmith, asumiendo la penalización y saliendo al tercer tramo de la mañana después de Sébastien Ogier y antes de Thierry Neuville para así evitar barrerle las especiales al francés en una sección matinal con unos tramos muy blandos en los que la pista iba mejorando con el paso de cada coche.

La situación les salía parcialmente bien, ya que Ogier le robaba una décima a Neuville en su diferencia, pero al menos Tänak sumaba un nuevo scratch, el tercero en su ya más que condicionada participación en la prueba de casa. No alteraría demasiado a Rovanperä, que conseguía prácticamente calcar el tiempo de Ott y ampliaba su renta sobre Breen hasta los 36 segundos a falta de un tramo para terminar la mañana: «Creo que después de esto podemos empezar a ser más inteligentes. No es tan fácil ser inteligente en este tipo de rallyes, hay que tener buen ritmo«.

Parecía que, salvo problemas, Breen ya había aceptado que iba a ser prácticamente imposible replicar el ritmo de Kalle, por lo que el irlandés aprovechaba cada entrevista para reivindicarse, especialmente cuando le preguntaban qué necesitaba para poder igualar el ritmo del finlandés de Toyota: “Necesito una temporada completa. Tan simple como eso. Si puedo subir al coche con más frecuencia, podría hacerlo en cada tramo (alcanzar a Rovanperä)«. Era el momento sin duda de hacerlo, ya que Neuville empezaba a sufrir el empuje de Ogier, con el francés situándose a 5,8 segundos de la deseada tercera plaza del podio.

Habría una respuesta mínima por parte de Breen, recortando apenas tres décimas a una ya abultada diferencia por parte de Rovanperä, el cual ya avisaba que estaba listo para gestionar el colchón. Al finalizar el bucle, era Ott Tänak el que sumaba un nuevo scratch, el tercero consecutivo, después de decir que se ha limitado esta mañana a tomárselo como un test, mientras que la brecha entre Kalle y Craig se sitúa en los 35,7 segundos y Ogier se ha quedado a apenas 4,5 segundos de Neuville en una lucha mano a mano en la que se está jugando mucho más que un tercer puesto. Evans, quinto, es sabedor de que no tiene la velocidad aquí para meterse en batallas perdidas, por lo que esperar algún fallo por delante que le permita ganar plazas, situación similar a las de Teemu Suninen y Pierre-Louis Loubet.

Como ya sucediera ayer por la tarde, el último tramo del bucle estaría condicionado por el accidente de uno de los competidores en R5/Rally2. El Volkswagen Polo GTI R5 de Nikolay Gryazin aparecía volcado en el último tramo ante los gestos de incredulidad de Mads Ostberg, el cual se acercaba al coche del ruso con el plano del alerón en la mano para interesarse sobre su estado. Quedaba por tanto la especial neutralizada y a la espera de conocer cómo serán las compensaciones de tiempo, pero Andreas Mikkelsen parece que conservará por un rato más la primera plaza en WRC2, mientras que en WRC3, Alexey Lukyanuk se ha desembarazado de su rival, Emil Lindholm, después de que el finlandés haya abandonado por accidente. Esto permite ganar posiciones a Pepe López, cuarto.

Clasificación tras TC13 – Rally de Estonia 2021: