El lunes estaba marcado como la jornada en la que Red Bull Racing podría sentarse a determinar el futuro de Checo Pérez en la escudería. Aunque el piloto mexicano partió desde la segunda plaza de parrilla, su resultado volvió a estar fuera del Top5, e incluso con la descalificación de George Russell, el tapatío se tuvo que conformar con ser séptimo entre los dos pilotos españoles, Carlos Sainz que fue finalmente sexto y Fernando Alonso que fue octavo.
La presión era por tanto aún mayor para Pérez, el cual lleva fuera de los podios desde el Gran Premio de Miami en el que terminó cuarto, justo un fin de semana antes de que Red Bull implementara las evoluciones en el RB20 que al parecer restaron confianza a ambos pilotos de la escudería con sede en Milton Keynes. A partir de ese punto, su mejor resultado han sido los tres séptimos puestos conseguidos en Austria, Hungría y Bélgica.
Esta situación lleva al mexicano a estar séptimo del Mundial con 131 puntos, aunque con la victoria provisional de George Russell llegó a descender incluso a la octava posición. Sin embargo, lo que parece preocupar más al equipo es que desde los 18 puntos conseguidos en Japón gracias a su segundo puesto, la contribución de Checo se ha reducido significativamente, y si bien en los fines de semana al sprint de China y Miami logró contribuir con otros 18 y 21 puntos respectivamente, a partir de ahí la cifra se ha reducido de tal forma que entre los últimos ocho grandes premios disputados, sólo ha sumado 28 puntos, incluido el de la vuelta rápida del pasado Gran Premio de Bélgica por los 141 conseguidos por Max Verstappen.
La situación parecía compleja, hasta el punto de que cualquier imagen, incluida la conversación de Christian Horner con Daniel Ricciardo y Laurent Mekies después de la carrera de este domingo se podía interpretar como una señal, e incluso se habló de un posible test en el que participarían los dos pilotos de Racing Bulls, así como Liam Lawson y Ritmo Miyata. Sea como fuere, hoy fuentes internas del equipo Red Bull Racing han confirmado al medio neerlandés ‘De Telegraaf’ las intenciones por parte de la escudería de mantener a Checo Pérez lo que resta de temporada.
Al parecer, el propio Horner tras la reunión con Helmut Marko dijo frente a los empleados de Milton Keynes: «Checo sigue siendo piloto de Red Bull Racing, a pesar de todas las especulaciones recientes. Esperamos verlo actuar en circuitos donde lo ha hecho bien antes, después de las vacaciones de verano”. De esta forma, todo parece apuntar a que Pérez volverá a estar subido en el RB20 con el dorsal #11 cuando la competición se retome ya a finales de agosto en el Circuito de Zandvoort. En la general de constructores, McLaren ya está únicamente a 42 puntos de Red Bull Racing.
Vía | Telegraaf