“Una solución innovadora que explota las ambigüedades del reglamento técnico”. Así rezaba uno de los puntos de la decisión final tomada por los comisarios técnicos de la Federación Internacional de Automovilismo acerca de los casos de los dos monoplazas de Renault en el pasado Gran Premio de Japón. La firma del rombo se quedaba sin los puntos obtenidos en Suzuka, a pesar de que tal y como resume la decisión, no se encontró ningún elemento que incumpliera la normativa técnica del campeonato.
¿Por qué fueron entonces descalificados del Gran Premio de Japón 2019 tanto Daniel Ricciardo como Nico Hülkenberg? Tal y como apuntaba Eloy ayer por la noche, el sistema encontrado por la FIA en el sistema de control de los monoplazas galos, además de ingenioso, vulneraba el espíritu del reglamento deportivo, concretamente en el punto en el que se dice que los pilotos deberán conducir sus coches “solos y sin ningún tipo de ayuda”.
La declaración emitida por la FIA dejaba abierta la oportunidad a que Renault F1 Team pueda presentar una apelación a esta decisión antes de las 10 de la mañana del jueves 24 de octubre en México (las 17:00 en la España peninsular), por lo que faltan unas horas para saber si el fabricante francés reclama su sexta y décima plazas obtenidas en el Gran Premio de Japón tal y como adelantaba en su primer comunicado tras conocerse la descalificación. La denuncia presentada por Racing Point, aunque admitida a tramite había quedado sin efecto al descartar la utilización del sistema pre-establecido del que hablaba la escudería. Sin embargo, quedó evidenciado que algo ocultaba Renault.
A pesar de que la FIA coincidió con Renault en que el sistema era completamente legal bajo las Regulaciones Técnicas de la FIA, los delegados juzgaron que el sistema infringía las Regulaciones Deportivas de la FIA con respecto a la ayuda al conductor. Ambos Renault fueron descalificados del Gran Premio de Japón y el equipo pierde los nueve puntos anotados. Sin embargo, considerando la subjetividad de la calificación de un sistema como ayuda al conductor y la variabilidad de las penalizaciones asociadas en casos recientes, el equipo Renault F1 considerará su próximo curso de acción dentro del plazo establecido por la FIA.
Queda sin embargo la sensación de que algo no se nos ha revelado. Sí, está claro que la FIA ha decidido acogerse “a la propiedad intelectual” para no hacer pública esa región gris del reglamento de la que ha sacado provecho Renault, sin embargo, quedan algunas dudas por resolver. Si el chivatazo llegó por parte de un exempleado/ingeniero de la firma del rombo que trabajó con Nico Hülkenberg y que desembarcó en Racing Point hace unos meses (supuestamente desde agosto), ¿por qué se ha tardado tanto en denunciar este sistema si se tenía constancia del mismo desde el verano?
La otra pregunta es sobre la severidad de la sanción. Sin conocer el grado de “ayuda a los pilotos” que este elemento supone, así como su fecha de implementación, es difícil hablar de si la decisión es suficiente o no, algo que incluso ha llevado a levantar suspicacias en algunos medios acerca de si esta no era una decisión a medias tintas para evitar una reacción definitiva por parte de la cúpula de Renault. Faltan datos.