No ha sido una buena semana para Red Bull después de recibir el varapalo de que la FIA considerara que el motor Renault se encuentra equiparado a los de Ferrari y Mercedes-Benz (todos ellos en menos de tres décimas). La escudería de las bebidas energéticas está preparada para hacer debutar una nueva especificación de su chasis en el próximo Gran Premio de España, algo que vendría seguido de una evolución del motor Renault que estaba programada para junio, previsiblemente para el GP de Canadá.
Sin embargo, Cyril Abiteboul tenía una desagradable sorpresa tanto para Red Bull, como para Toro Rosso y los propios pilotos oficiales de la firma del rombo. Problemas de fiabilidad han retrasado la introducción de dicho paquete de mejoras en la unidad de potencia, previsiblemente para finales de julio, antes del parón veraniego, por lo que podría significar que no sería hasta Baku que los tres equipos tengan ‘alas nuevas’ para plantar cara a los Mercedes AMG y Ferrari, absolutos dominadores de este inicio de temporada.
Queremos introducirla antes del parón veraniego. Queremos mantener la sincronía con integración de las unidades de potencias y, queremos hacerlo con la tercera unidad si es posible. Nos estamos encontrando algunas limitaciones, pero creemos que el concepto que hemos introducido este año ese el correcto. Sabemos que tenemos algo de fragilidad en el sistema con la que tenemos que trabajar.
Jarro de agua fría por tanto para Red Bull Racing, la cual se está viendo lastrada en este inicio de temporada por ciertas carencias en el diseño del monoplaza y especialmente por el déficit de potencia que tiene frente a sus rivales (sin tener en cuenta a Honda). Mientras tanto, Toro Rosso y Renault siguen peleando con Force India y Williams por copar los puestos de cabeza en las posiciones medias de parrilla, algo que se complica en pistas con largas rectas, en las que el propulsor Mercedes-Benz marca la diferencia.
Vía | Autosport