A sus 49 años de edad, y 30 como profesional, el piloto británico Richard Westbrook anunció que colgará su casco al término de esta temporada del Campeonato IMSA WeatherTech SportsCar. Si bien tenía un contrato que le garantizaba otro año como piloto del Porsche 963 de JDC-Miller Motorsports, Westbrook comunicó que tras reflexionar sobre sus vivencias y su trayectoria consideró que es el momento más adecuado para salir de escena y permitir que las nuevas generaciones disfruten y demuestren su talento. Se marcha con una gran experiencia sobre sus espaldas y con la satisfacción de ganar las 24 Horas de Daytona, las 12 Horas de Sebring y el título en el Campeonato FIA GT.
En sus inicios, Westbrook experimentó muchos problemas económicos para poder demostrar sus habilidades, inclusive pausó su carrera durante seis años. Es en el año 2003 cuando pudo conseguir dinero, gracias a la venta de su apartamento y otro monto que pidió prestado, para adquirir un Porsche GT3 e inscribirse en la Porsche Carrera Cup GB, donde alcanzó el título e impuso varios registros que todavía están vigentes. A partir de sus demostraciones en pista comenzó a llamar la atención, fue invitado a las 24 Horas de Le Mans y para 2008 pasó a formar parte de la plantilla de pilotos de fábrica de Porsche, luego pasaría a las filas de Corvette Racing a partir de 2011 y posteriormente de Ford en el 2016.
Tras recordar gran parte de lo que ha experimentado en las pistas, está convencido de que retirarse de esta manera, con un contrato vigente, es lo más decoroso para un piloto porque es su decisión la que prevalece y no lo está haciendo porque no le conceden un asiento. Para el piloto este punto es muy importante porque justamente quiere evitar esa sensación de que le obliguen a hacerse a un lado o que le hagan entender a la fuerza que su tiempo terminó. Se siente orgulloso del camino transitado. Ahora quiere disfrutar de más tiempo junto a su familia y de atender su negocio cervecero.
En palabras de Richard Westbrook:
Esta es la primera vez que me pregunto si debería estar en la pista o no. Miraré atrás sin remordimientos y me sentiré muy orgulloso de lo que he logrado con la ayuda de mi familia. Estoy feliz de haber tomado la decisión yo mismo en lugar de que me obligaran a retirarme, y puedo anunciarlo antes de la última carrera del año. Vaya, fue increíble, pasar de no tener nada en Londres, estar en un estado terrible, a pasar por todos estos programas de fábrica. Tengo tantos buenos recuerdos que nunca tuve la oportunidad de disfrutar y no puedo esperar a hacerlo, con una lata de Westbrook en la mano.
Vía Sportscar365
