Robert Kubica ha liderado la tanda inicial de test de la segunda semana de test en el Circuit de Barcelona-Catalunya. Con los equipos ya en preparación del Gran Premio de Australia, las evoluciones y los programas de trabajo aumentan conforme pasan los días. Ese constante trajín se ha demostrado con el buen registro del polaco de Alfa-Romeo, que presumiblemente rodó en programa de clasificación.
En el momento de colocar el micro delante del polaco, éste ha quitado hierro al asunto de liderar las pruebas matinales. Con un ojo en evolucionar el coche y el otro en Australia, Kubica insiste en que hay mucho más trabajo entre bambalinas que en pista. A su vez, remarca la actuación de su equipo ante si ‘feedback’.
«No es muy relevante el mejor tiempo. Lo que importa son las sensaciones en el coche, y cuando ruedas 2 o 3 segundos más rápido que el año pasado, todo cambia y todo es más sencillo de leer. Hemos tenido una buena mañana. Pese a unos problemas, hemos completado el 90% de lo que teníamos planeado. Creo que tenemos algo de margen, con nuevas piezas en camino. Las sensaciones de todos los pilotos eran que debíamos mejorar. La reacción ha sido buena, y queda optimizar un poco todo, pero es genial ver que el equipo responde y reacciona dando valor a lo que dices. Tenemos margen de evolución, y como siempre, los test invernales son muy ajetreados y animados».
Kubica tuvo el primer contacto a modo competitivo hace 12 meses, con Williams, de la nueva F1. Tras su accidente de 2011, el polaco regresó y la diferencia temporal se notó. Con un año de experiencia en el que fue el peor equipo de 2019, la llegada a Alfa-Romeo le ha abierto la puerta a mejorar su velocidad en pista, y las comparaciones no se han hecho de esperar. Con especial atención a la aerodinámica del Williams, Kubica agradece estar en un lugar con algo más de capacidad.
«¡La gente se piensa que cuán más rápido vas es más difícil! Puedo argumentar que es más fácil hacer 1:16 ahora que 1:19 el año pasado. La dificultad es distinta. La semana pasada, mi cerebro no procesaba lo que ocurría. Sé cómo son las sensaciones en este circuito, y me costó un par de giros adaptarme a la adherencia extra. Hay un buen amigo en este paddock, y no hay muchos: el agarre aerodinámico. Una vez hay agarre aerodinámico, las cosas van a mejor. Cuando saltas del coche del año pasado a este, hay mucha diferencia. Me alegra que Williams evolucione. Hay muchas personas capaces en el equipo, y es genial ver que pueden estar en la pelea. No hay nada fácil en F1, sea con quién sea, siempre hay dificultades».
El próximo desafío de Robert Kubica será el DTM, con BMW. Pese a ese trabajo fuera de la F1, el polaco no olvida que también se debe a Alfa-Romeo. Analizar las piezas de los test y compartir opinión y sensaciones con Kimi Räikkönen y Antonio Giovinazzi es parte de su trabajo. Con eso se confirma que el trabajo es constante en Hinwill.
«Probablemente la próxima vez que me suba a un coche sea en otra categoría. Eso no significa que no trabaje, será un periodo bastante ajetreado: ayudar a Alfa-Romeo e iniciar a competir en otro campeonato y otras cosas que haré en 2020. Lo que no sé es cuando volveré al coche», ha concluido el de Cracovia
Foto | Alfa Romeo-Sauber Media