Seis años, cuatro meses y tres días desde la última vez que se subió a un Fórmula 1 y seis años y cuatro meses después de su gravísimo accidente, Robert Kubica volverá a pilotar un monoplaza de la máxima categoría. El polaco vuelve a hacer aquello por lo que su vida cobra sentido y es que a pesar de sus buenos resultados en los rallyes -fue campeón del mundo de WRC2 aunque no acabó de cuajar en la clase mayor por su agresividad-, el piloto reconocía que nada se acercaba a la Fórmula 1 en su corazón. Quien le da la oportunidad es nada más y nada menos que Renault, ese «Team Enstone» con el que estaba en 2011 cuando sufrió el accidente que le cambió la vida.
El test de Robert Kubica se producirá en el Circuito Ricardo Tormo de Cheste y el coche elegido será el Lotus-Renault E20. Es como si no hubiera pasado el tiempo y si el último coche que pilotó en su carrera deportiva en la categoría reina era el de la temporada 2011, ahora es el turno de la máquina de 2012. La prueba se realizará mañana, el martes día 6 de junio y es el siguiente paso tras unos meses que han visto a Kubica probar en dos ocasiones separadas un monoplaza de GP3 en Franciacorta y Cremona (Italia) y el Dallara LMP2 de SMP Racing en Monza. También llega en un año convulso en la que tenía que competir con ByKolles en LMP1 pero se bajó del proyecto antes de empezar la temporada.
Renault pone hoy en pista a Sergey Sirotkin, piloto de desarrollo del equipo que se ha subido ya este año al RS17 en los entrenamientos libres de los Grandes Premios de Rusia y España. El piloto ruso aprovechará la circunstancia para seguir sumando kilómetros aunque sin duda, servirá de vara de medir para que mañana Kubica tenga tiempos que buscar y quien sabe si batir. Tanto las pruebas de hoy como de mañana serán a puerta cerrada aunque si las cosas van bien, no sería de extrañar que Renault «presumiera» de haber devuelto al antaño prometedor piloto polaco. La pregunta que todo el mundo se hará ahora es, ¿qué esperará Kubica del futuro? A sus 32 años, ¿es posible plantearse un retorno a la categoría reina?