Es inevitable -y triste- que cada año haya alguna pérdida humana en el mundo del motorsport. En los casos menos dramáticos, la vida y el tiempo siguen con su lento pero seguro paso y nos dejan sin alguna leyenda del deporte. En otros casos igualmente tristes pero más desgarradores, situaciones evitables se llevan por delante la vida de viejos conocidos como el reciente caso de Ángel Nieto. Otros son incluso pilotos en activo. Eso fue lo que ocurrió en un lamentable accidente de tráfico en Italia, tras el cual falleció el piloto norteamericano de motociclismo Nicky Hayden. Conocido como «Kentucky Kid», era un deportista muy querido en su país y por ello Romain Grosjean le homenajeará en el próximo Gran Premio de Estados Unidos con un casco especial.
La forma en la que el piloto francés realizará su particular homenaje a Nicky Hayden será con un casco inspirado en el que el piloto estadounidense lució en las carreras de su país en la temporada 2012 del Campeonato del Mundo de Motociclismo. El diseño básico de las barras y estrellas se mantiene aunque lo más remarcable no son los colores sino el hecho que la decoración pretende imitar el aspecto que tendría un casco de tipo «Cromwell» con la cara descubierta. De hecho, tanto en la versión original del casco de Hayden como en el que Grosjean usará este año en Austin, se puede ver la cara del piloto -pintada, claro- en los laterales, simulando ese curioso efecto.
Aquellos con ojos más agudos se habrán dado cuenta de una diferencia clave en los cascos de Hayden y Grosjean y es que en el caso del segundo, la cara que aparecerá en los laterales será la suya y no la del malogrado piloto de motos como en el original. Más allá del punto más curioso del diseño, el casco mostrará también detalles como tiras de piel alrededor del simulado casco abierto e incluso una hebilla posterior. Habrá que ver si el casco le trae suerte a Grosjean pero lo que está claro es que para la cita de Texas, el francés combinará un fantástico estilo con un mejor y muy sentido homenaje a un compañero. Detalles como estos siempre son agradables de ver, aunque tengan que darse como consecuencia de sucesos tan tristes.