Aunque también han surgido voces preocupadas hacia algo que consideran muchos que es un precipitado salto hacia la competición 100% eléctrica, cada vez son más los campeonatos que apuestan por este tipo de tecnología de propulsión para su futuro a corto o medio plazo. El Trofeo Andros y el Mundial de RallyCross ya han confirmado hace meses que su categoría reina pasará a utilizar coches no propulsados por motores de combustión interna, la Fórmula E ha atraído numerosos fabricantes de cara a su quinta y sexta temporada, mientras que el TCR ya planea una versión eléctrica que llegará previsiblemente para 2020 con marcas como Cupra trabajando ya en su modelo de competición.
En Liberty Media son conscientes de que la Fórmula 1 no fue la primera en adoptar la arquitectura híbrida, entrando siempre en comparación directa con el desarrollo de los sistemas de los LMP1 y dando pie a que algunas voces críticas apuntaron a la posible depreciación del Gran Circo como ‘el pináculo de la tecnología de competición’. Ross Brawn ha asegurado que es perfectamente consciente la progresión de los sistemas de propulsión completamente eléctricos, sin embargo, no está dispuesto a que la F1 se precipite a un salto del que hay que estar muy seguros debido a todo lo que ello conlleva. Sin duda es mucho más sencillo para un campeonato de nueva creación.
Con todo respeto, esta es una categoría muy joven (sobre la Fórmula E). Es un gran evento en términos de todo lo que ocurre, pero la carrera en sí es bastante insulsa en comparación con un Gran Premio de Fórmula 1. Los coches no son particularmente rápidos. Es una fórmula junior más pequeña. Pero hacen un trabajo fabuloso con el evento, convirtiéndolo en una fiesta urbana, sin embargo, la Fórmula 1 es diferente. La Fórmula 1 es el pináculo del automovilismo, por las velocidades alcanzadas, el calibre de los conductores y los equipos que tenemos.
Aun así, el director deportivo de Liberty Media apunta a que no hay ninguna puerta cerrada para el futuro del Mundial de Fórmula 1, incluso la opción de que los coches pasen a ser 100% eléctricos, algo que se ha empeñado en recalcar que no ocurrirá por el momento ya que por el momento esta tecnología no reporta los niveles de espectáculo necesarios.
No necesariamente veo la Fórmula 1 encerrada para siempre en motores de combustión interna. ¿Quién sabe dónde estaremos en 10 años? Hace diez años, no creo que muchas personas pudieran haber predicho la situación del mundo, así que no sé dónde vamos a estar dentro de 10 años. Pero la Fórmula 1 se moverá en la dirección correcta. Creo que la Fórmula 1 evolucionará en la dirección que tiene el equilibrio adecuado de deporte, relevancia y compromiso con los aficionados. Si es en cinco años o diez años, o tan pronto como haya una necesidad, un deseo, de tener otro tipo de motor en la Fórmula 1, lo haremos. Nada nos impide tener coches eléctricos de Fórmula 1 en el futuro. Por el momento, esto no ofrece el espectáculo deseado.
Vía | AUTOHebdo