Toda vez que Sauber se prepara para dejar de lado el patrocinio de Alfa Romeo el año que viene, Alessandro Alunni Bravi, representante de la escudería, adelantó que el nuevo coche no tendrá nada que ver con el actual monoplaza, el cual ha sido tan deficiente que el equipo es penúltimo en la tabla de constructores. Explicó Bravi que la llegada de James Key al departamento técnico significa que se aplicarán cambios según su criterio y por tal razón se ha decidido no dar continuidad a lo propuesto en el C43 y optar por presentar un diseño muy distinto.
Indicó que Key cuenta con total confianza para concebir sus ideas, su paso previo por Sauber, desde el año 2010 hasta el 2012, dejó constancia de su talento en el diseño, suyo es el C31, el cual se mostró muy competitivo hasta el punto de alcanzar cuatro podios. El ingeniero británico es consciente de las limitaciones actuales, un monoplaza muy complicado para desarrollar porque carece de velocidad en todo tipo de circuito y se ha mostrado sin agarre en curvas rápidas. A Valtteri Bottas y a Guanyu Zhou les ha costado acceder a Q3 y por lo regular sufren para finalizar entre los diez primeros en cada gran premio.
Así que Sauber aplicará la misma metodología que Mercedes en el sentido de cerrar un ciclo e iniciar otro, los alemanes comunicaron que James Allison desechará las propuestas técnicas que planteó Mike Elliott los últimos dos años, en tanto Bravi afirma que James Key hará lo mismo con el trabajo efectuado por Jan Monchaux en la concepción del C43. Según Bravi, han investigado las razones por las que al actual monoplaza es tan irregular y se optó por no trasladar nada del concepto básico a 2024 en vista de que durante esta temporada los ingenieros no han sido capaces de avanzar, fracasando en toda la planificación referente al desarrollo.
Sauber iniciará el año que viene un proceso de transición que le llevará a ser escudería oficial Audi a partir de 2026, por tal razón Andreas Seidl, director ejecutivo del proyecto, contrató a James Key tras salir de McLaren este año. Ambos se han erigido como las piedras angulares del proyecto alemán y por ello se espera que se deje atrás buena parte de lo que significó el equipo Alfa Romeo, el cual quedará atrás como un anhelo de Sergio Marchionne que no se llegó a materializar por completo tras la desaparición física del italiano en 2018.
En palabras de Alessandro Alunni Bravi:
El coche del año que viene no será una evolución del de este año, porque creemos que hay algunos límites en este concepto que no podemos explotar más. Realmente tendremos un monoplaza completamente nuevo, desde el chasis hasta la suspensión, todo, todas las áreas. Por supuesto, es fácil identificar los problemas, pero luego hay que poder solucionarlos.
Vía Motorsportweek
