Por fin tenemos la primera imagen real de uno de los monoplazas para la temporada 2017. Sauber ha presentado hace sólo unos minutos su C36, el coche con el que competirán en su 25ª campaña dentro del gran circo y con el que tratarán de evitar el puesto de farolillo rojo dejado por Manor después de la desaparición de la escudería británica. Para ello repetirán Marcus Ericsson y contarán con la llegada de Pascal Wehrlein, siempre que el físico se lo permita al alemán que no estará presente en los primeros test de pretemporada.
Para conmemorar este aniversario, Sauber cambia el azul y amarillo de la pasada temporada por una nueva librea en la que se añaden el blanco y el dorado. El monoplaza, tras la salida de Felipe Nasr y de sus patrocinadores brasileros, luce prácticamente libre de sponsors, únicamente manteniendo algunos apoyos como la CNBC o Silanna.
Pontones más estilizados, alerón trasero completamente nuevo y aleta de tiburón, siguiendo con una filosofía que seguramente se extenderá al resto de los monoplazas (ya se pudo ver en el render del Williams FW40). Aunque posiblemente lo más peculiar es al Airbox, la entrada de aire de la chimenea, separada en dos por un tabique central. El coche hará su debut en pista el próximo miércoles, durante un filming day que se realizará en el Circuito de Barcelona-Catalunya. El estreno oficioso será junto a los demás equipos el próximo 27 de febrero, test en los que estarán presentes Ericsson y Antonio Giovinazzi.
Los coches vuelven a ser más anchos, de los 1,80 metros a 2 metros. Las ruedas son también más anchas, en torno al 25%, así como los alerones traseros y delanteros, con un difusor más largo. En resumen, esto significa más carga aerodinámica, más grip y, como resultado, mejores tiempos de vuelta.
Según el recién llegado a Hinwil, Jörg Zander, nuevo director técnico del equipo suizo (ya trabajó con ellos en la etapa de BMW Sauber F1 entre 2006 y 2007), se ha basado el trabajo en reducir el coeficiente de resistencia aerodinámica, así como rebajar el peso al máximo posible. Es un coche completamente nuevo respecto a su predecesor, el C35, del cual no se ha podido aprovechar nada. En cuanto al propulsor y la transmisión, se utilizarán los del Ferrari del año pasado, con la configuración empleada en el Gran Premio de Abu Dhabi 2016.
