Durante los últimos años, había sido Mercedes-AMG la que había tenido el problema de tener que buscar un asiento para que sus jóvenes pilotos pudieran hacer sus primeros pinitos dentro de la categoría reina. Ahora es la Scuderia Ferrari la que está encontrándose con una problemática similar a la que tuvieron los alemanes con Pascal Wehrlein y Esteban Ocon de cara a esta temporada.
Con Sebastian Vettel cerca de anunciar su renovación y los rumores apuntando a que Kimi Räikkönen permanecerá una temporada más ligado a los de Maranello, Ferrari se encuentra con que sus dos jóvenes pilotos que vienen asombrando desde hace meses no tienen hueco dentro de la escudería italiana para la temporada 2018. Mientras que Antonio Giovinazzi ha tenido que conformarse este año con sustituir al lesionado Pascal Wehrlein y hacer algunas sesiones de entrenamientos libres, Charles Leclerc sigue asombrando dentro de la Fórmula 2 con una contundencia que sólo se ha visto a algunos de los mejores campeones que han pasado en años anteriores por GP2.
El recientemente anunciado acuerdo con Sauber para seguir suministrándole motores ha abierto una opción para el equipo suizo: ser el equipo de jóvenes pilotos de Ferrari, o lo que también se conoce como el Junior Team, algo que actualmente ya hace Red Bull Racing con la Scuderia Toro Rosso.
Según lo que ha revelado la propia escudería Ferrari a Autosport, es una opción que se está planteando en las conversaciones con Frederic Vasseur, algo que reportaría beneficios a todas las partes, siendo Sauber la que obtendría beneficios económicos, posiblemente en forma de un alquiler de las unidades de potencia más baratas, y la presencia de dos de los pilotos con mayor proyección. En el caso de Ferrari se aseguraría que sus pilotos siguen formándose en un equipo de confianza, evitando además una fuga de cerebros en el peor momento, justo cuando ahora sí, se espera que Kimi Räikkönen esté ante su última temporada.
Vía | Autosport
