El pasado fin de semana, el Supercars se trasladó al circuito Symmons Plains Raceway para disputar las dos fechas correspondientes a la Tyrepower Tasmania SuperSprint, séptima y octava válidas del calendario. Sería la primera ocasión en la temporada que se observarían los coches tras los ajustes realizados por parte de la dirección técnica del Supercars. No obstante, el día sábado, Scott McLaughlin y Fabian Coulthard otorgaron el uno-dos a DJR Team Penske, la séptima victoria consecutiva del Ford Mustang, aunque en esta ocasión se cortó la cadena de poles ya que ese privilegio correspondió a Mark Winterbotton y el Holden Commodore de Irwin Racing.
Al apagarse los semáforos, McLaughlin desplazó al poleman y asumió el liderato de la carrera y a medida que transcurrían las vueltas ampliaban la ventaja con respecto a David Reynolds, Fabian Coulthard, Shane van Gisbergen y Winterbottom. Estos dos últimos nombrados se enfrascaron en una fuerte disputa por el tercer escalón del podio, tras demorarse Winterbotton más de lo debido en una detención en los boxes y luego no poder aguantar el mejor ritmo del piloto de Red Bull en las vueltas finales. En las primeras de cambio, Jamie Whincup sufrió un incidente de carrera y quedó relegado, lo que complicó su situación en el campeonato. McLaughlin y su Mustang prácticamente repitieron la receta que le ha servido para afianzarse en la cima del Supercars, una vez que se hizo con la delantera dosificó su ritmo y se limitó a administrar su ventaja, inclusive tras las paradas para cambiar sus neumáticos.
Si bien la ventaja final de McLaughlin con respecto a Coulthard fue de apenas dos segundos, el líder de la temporada siempre mantuvo control de la situación. Fue su primera victoria en el circuito, su sexta de la temporada y la trigésimo primera de su trayectoria en el Supercars. En tanto para Coulthard fue su segundo podio. Tras Winterbotton finalizaron James Courtney, David Reynolds, Tim Slade, Nick Percat, Anton de Pasquale y Chaz Mostert, quien al igual que Whincup, tuvo una tarde para el olvido.
En lo que respecta a la carrera del domingo, pautada a 84 vueltas, el Holden Commodore de Shane van Gisbergen acabó con la seguidilla de victorias del Ford Mustang en el campeonato australiano. El piloto de Red Bull resultó el más consistente en la segunda parte de la carrera y en base a una efectiva estrategia en los boxes pudo salir por delante de Fabian Coulthard y cruzar la línea de meta con una ventaja de 5.1877 segundos. A pesar de que cayó una leve llovizna en el circuito, antes y durante una pequeña parte de la carrera, el evento no ofreció mayores alternativas puesto que los tres primeros en la formación de salida, Shane van Gisbergen, Fabian Coulthard y David Reynolds mantuvieron sus respectivas posiciones hasta la bandera a cuadros, en tanto Scott McLaughlin, quien salió desde el quinto lugar, no corrió mayores riesgos y finalizó en el cuarto puesto. El piloto de la jornada fue sin duda Jaimie Whincup ya que salió desde el puesto 13 y llegó en el quinto lugar.
En teoría, los pilotos de DJR Team Penske y de Red Bull Holden estarían animando la contienda, pero la mayor parte de los ataques quedaron en amagos. Coulthard intentó inquietar en varios pasajes de la carrera a van Gisbergen, pero no pudo adelantarlo. Las estrategias en los boxes tampoco fueron determinantes para los pilotos con opciones para destacar. Tras las primeras detenciones, van Gisbergen salió con neumáticos fríos por detrás de Coulthard y por delante de McLaughlin, pero una vez que sus compuestos entraron en temperatura óptima, el piloto de Holden puso distancia de por medio con respecto a su perseguidor y dio cuenta de Coulthard en la vuelta 43, lo que dejaba en el ambiente una reiteración de ritmos cuando los líderes volvieran a detenerse.
Por detrás de Whincup, finalizaron Mark Winterbottom, Nick Percat, Scott Pye, Lee Holdsworth y Chaz Mostert. Mención aparte para Anton De Pasquale, el piloto de Penrite Racing resultó uno de los grandes animadores de la carrera, pero rompió la palanca de cambios de su Holden Commodore y eso le privó finalizar en el séptimo lugar. El campeonato tiene a McLaughlin con 770 puntos al frente, Coulthard marcha segundo con 646, Whincup acumula 610, van Gisbergen 604 y Reynolds 599.
Vía | Supercars