Giacomo Mattioli, propietario de Scuderia Corsa, anunció que, tras observar el desempeño del piloto Oriol Serviá en la reciente edición de las 500 Millas de Indianápolis, ha tomado la decisión de volver a la IndyCar el año que viene, sea en conjunto con Rahal Letterman Lanigan Racing o con otro equipo. Indicó Mattioli que en Indianápolis pagaron el noviciado al utilizar una estrategia de paradas diferente que les llevó del primer lugar, a pocas vueltas del final, a culminar la carrera en el lugar 17.
Añadió que aún con la decepción del resultado final, la experiencia fue muy grata, tanto que ha propuesto a sus socios estructurar un programa para correr toda la temporada de IndyCar en 2019. Entiende que no será sencillo, pero en caso de no lograr tan ambicioso objetivo, correr las 500 Millas de Indianápolis sí será seguro, por lo menos hasta la edición de 2021. El plan es que Scuderia Corsa tenga presencia en la IndyCar, aunque en principio sea en sociedad con otro equipo establecido.
Mattioli aprovechó la ocasión para aclarar que el interés y el esfuerzo de Scuderia Corsa en la IndyCar no tiene nada que ver con Ferrari, porque si bien tiene un vínculo de largo tiempo con la fábrica de Maranello, no hay espacio para especular acerca de un programa de suministro de motores Ferrari en el campeonato norteamericano, en todo caso las preguntas se las tendrían que realizar a Sergio Marchionne, quien es responsable de tomar las decisiones en el emporio Fiat Chrysler.
En palabras de Giacomo Mattioli:
¡Lo intentamos! Ha sido un mes muy emocionante, iniciando con el Bump Day y luego la experiencia en la clasificación, después la carrera y esas últimas 25 vueltas. En un momento llegamos a creer que podíamos hacerlo muy bien, a pesar de que Chevrolet fue más fuerte. Pero todo fue increíble. Nos comprometemos con las 500 Millas de Indianápolis del próximo año e igualmente estamos tratando de que Scuderia Corsa arme un programa para correr toda la temporada. Fue una gran experiencia este aprendizaje.
Vía | Racer