Son muchas las elecciones que se han producido dentro del mundo del deporte en las que una u otra decisión podrían haber cambiado por completo lo ocurrido a posteriori, dando una vuelta completa a los libros de historia. Incluso los pilotos que más fieles han sido a una marca, lo que se suelen llamar los “One Club Man”, han tenido a lo largo de sus carreras la oportunidad de cambiar de aires y recalar en otra estructura con la que haber podido seguir cosechando triunfos o con la que podrían no haber llegado a los guarismos con los que han dejado su impronta dentro del motorsport.
Al ser una competición en la que no sólo dependes de tu propio desempeño para salir vencedor, el automovilismo siempre ha vivido embarcado en el “y si…”, haciendo siempre referencia a cómo habría cambiado la historia de las carreras en caso de que un piloto hubiera optado por un movimiento distinto a la decisión que realmente tomó.
Galería de imágenes – Sébastien Loeb (DTM 2022)
En el caso de Sébastien Loeb, ya hemos hablado en más de una ocasión que tanto Malcolm Wilson como David Richards llamaron a su puerta en sus primeras etapas como piloto del WRC, e incluso Volkswagen trató de contratarle ante su llegada al campeonato. Sin embargo, para el alsaciano no se ha hablado en muchas ocasiones de su carrera en circuitos y de las opciones que llegó a tener sobre la mesa una vez que decidió alejarse de los rallyes a tiempo completo.
Más allá de esta internada en el GT Tour con un McLaren MP4-12C GT3 y con Álvaro Parente de compañero de equipo, Loeb se ha mantenido muy leal al Grupo PSA, compitiendo con Peugeot en el Dakar, Pikes Peak o el World RX, o disputando varias temporadas en el WTCC con la propia Citroën Racing. Aun así, tuvo opciones de cambiar de aires en más de una ocasión, y ahora se ha podido conocer que precisamente BMW fue uno de los que llamó a su puerta nada más decidir poner punto y final a su programa en el WRC.
Seb confirmó a Motorsport-Total que tuvo sobre la mesa la oportunidad de competir en el DTM de cara a la temporada 2013. La firma bávara acababa de entrar con fuerza en el campeonato después de cosechar el título de la campaña previa. Tras recibir la proposición de la firma muniquesa, Loeb reconoce que estuvo valorando seriamente su llegada al campeonato, pero que finalmente fue la decisión de continuar haciendo esporádicamente pruebas en el WRC la que terminó por llevar a que el acuerdo no se concretara.
Una vez estuve en conversaciones con un fabricante en DTM para participar en el campeonato. Eso fue hace casi 10 años, cuando me retiraba del WRC. Finalmente, decidimos hacer algo diferente, pero ya estaba investigando un poco el DTM hace mucho tiempo. Estaba hablando con BMW. Creo que estuvo bastante. Finalmente, decidí continuar en el WRC y eso detuvo nuestra discusión – Sébastien Loeb
Una década después, Loeb debutaba en el DTM, a principios de este mes de mayo y con uno de los Ferrari 488 GT3 de AF Corse, concretamente el de Nick Cassidy, el cual debía ser sustituido por incompatibilidad con su presencia en la Fórmula E. El galo termino 16º y 18º en las dos carreras disputadas en Portimao, aunque se ganó la admiración de más de uno debido a su rápida adaptación a la montura y a las carreras. Incluso el responsable de AF Corse se quedó ensimismado con su capacidad para anticipar todo lo que iba a suceder frente a él, una habilidad que sin lugar a dudas define a la perfección a un piloto de rallyes debido a su gran capacidad de asimilar lo que ocurre frente a él en los tramos.
La cámara a bordo de Seb en el reinicio de la primera carrera fue el video que más vi este fin de semana. Recuperó seis o siete posiciones en el proceso, y la sensación que tiene es simplemente increíble. No estaba anticipando el inicio, estaba anticipando lo que sucedería frente a él en la pista, hacia dónde iban los otros coches, quién podría tener contacto. Manejó como si supiera exactamente lo que iba a pasar – Ron Reichert