Por muy demagógico que resulte, al final tras ver una carrera como este Gran Premio de Francia de Fórmula 1 resulta inevitable hacer odiosas comparaciones. Una entrada de acceso general para toda la semana de las 24 Horas de Le Mans cuesta prácticamente la mitad que la más barata para entrar en Paul Ricard a lo que ha sido un espectáculo soporífero. ¿Alguien se pregunta por qué estaban las gradas vacías pues? Recordemos que además muchos espectadores escarmentaron de los atascos de 2018… Bien podríamos resumir todo mencionando la victoria de Hamilton, la vuelta rápida de Vettel y el buen nivel de McLaren entre los del resto, pero intentaremos explayarnos un poco más.
La salida prometió mucho pese a la buena arrancada de los Mercedes, con Verstappen, Leclerc o los McLaren de Sainz y Norris intentando aprovechar la anchura de la pista para sorprender por el exterior. Incluso el madrileño prolongó su acoso a Verstappen intentando sin éxito final rascar un puesto más mientras por detrás Sebastian Vettel se tomaba todo con mucha más cautela. El alemán tardó en adelantar a los McLaren y ello probablemente le sentenció a acabar quinto.
Lo cierto es que una pista ‘genérica’ como Paul Ricard puso a cada uno en su sitio. Una vez libró el momento de mayor tensión, la salida, Mercedes desplegó todo su potencial y Lewis Hamilton se encargó de alejar a Valtteri Bottas. El británico trataría de dar épica a su carrera comentando la batería de problemas a los que se tuvo que enfrentar, sin caer en la cuenta de que resaltando todos ellos sólo realzaba la impresión de dominio aplastante. ¿Qué ocurrirá el día que tenga una carrera tranquila?
En estas condiciones estándar lo lógico hubiese sido ver a Ferrari acabar tercera y cuarta, pero la posición de salida de Sebastian Vettel y la ya mencionada cautela lo complicaron, intentando el alemán y la casa italiana superar a Max Verstappen y Red Bull por estrategia, sin éxito al realizar Vettel un plano cuando decidió mantenerse en pista. Con la situación estable, no les quedó más remedio que rascar el punto de la vuelta rápida, algo que tan sólo lograron in extremis.
La atención en una carrera tan justa de emoción se derivó pronto al segundo grupo, donde McLaren parecía tener todo bajo control. Mas un ritmo conservador de Carlos Sainz primero y problemas hidráulicos de Lando Norris amenazaron su sexto y séptimo puesto provisional. Al final el británico quedó a merced de Daniel Ricciardo, quien de hecho excedió los límites de la pista para sobrepasarlo en la chicane de Mistral, volviéndolo a hacer el de Renault con Kimi Räikkönen metros más tarde. El australiano terminó siendo investigado y perdió el séptimo puesto por estas maniobras, conseguido por delante de Kimi, Hülkenberg y Norris.
Mención especial y por nada bueno merece Pierre Gasly. En su carrera de casa el piloto de Red Bull volvió a las andadas, no quedando fuera de los puntos sólo por los diez segundos de sanción a Ricciardo y acercándose ya peligrosamente a las fechas de la temporada en las que a Red Bull le gusta mover banquillo. Bien es cierto que en Toro Rosso tampoco se están viendo cosas extraordinarias y encima Kvyat y Albon se permitieron el lujo de pelear entre ellos…
Dos equipos sobresalieron en lo negativo. Haas fue una sombra de sí mismo, con Magnussen y Grosjean al fondo del pelotón durante toda la carrera. De hecho el abandono del galo en casa pasó prácticamente inadvertido. Y Williams sigue sin levantar cabeza, logrando eso sí Robert Kubica batir al fin a George Russell tras una defensa absurda nada más empezar la carrera frente a su compañero de equipo en Mistral…
El sexto doblete de Mercedes en ocho carreras consolida el liderato de Lewis Hamilton y la casa alemana en el Mundial. El británico disfruta ya de 36 puntos frente a su compañero Valtteri Bottas y tres carreras de ventaja sobre Sebastian Vettel. En Constructores el dominio es aún más apabullante, con 140 puntos de renta para Mercedes sobre Ferrari. Y afortunadamente sólo tendremos una semana de descanso para intentar olvidar este anodino fin de semana.
Foto | Daimler
