Si la silly season del Mundial de Rallyes parece cerca de definirse, al menos en lo que respecta a los principales pilotos sin contrato para la próxima temporada, la Fórmula 1 espera que se realicen los primeros anuncios oficiales acerca del futuro de McLaren, Renault, Honda y Toro Rosso, para empezar a encajar las piezas del mercado de fichajes. Carlos Sainz se ha erigido en pieza clave en todo ello. Un cambio de aires del madrileño obligaría a los de Faenza a buscarle un sustituto, algo para lo que Pierre Gasly parece estar muy bien colocado después de sus dos victorias consecutivas en el siempre difícil campeonato de la Super Fórmula.
Sin embargo, no serán los únicos movimientos que se puedan producir las próximas semanas de cara a la temporada 2018 de la Fórmula 1. Con Red Bull Racing y la Scuderia Ferrari cerradas, Vettel y Räikkönen renovaban, mientras que Ricciardo y Verstappen tienen contrato hasta finales de 2018 (Max podría tener opción de un año más), falta por cerrar entre los tres equipos de cabeza a Mercedes AMG. Mientras que Valtteri Bottas se está ganando la renovación a pulso, algo que han reconocido dentro del propio equipo de la estrella, la presencia esta semana de Lewis Hamilton en la presentación del Project One, deja claro que el británico sigue siendo la imagen de la formación de Brackley, por lo que su continuidad parece estar muy cerca de confirmarse.
La futura McLaren-Renault, la propia escudería del rombo y Toro Rosso, además de pertenecer actualmente a la clase media del campeonato, también deberán entenderse en este mercado de fichajes de transición de 2017, el cual precederá al del año que viene, en el que sí se espera una gran revolución entre los asientos. En Woking cerraron hace semanas la renovación de Stoffel Vandoorne aunque no especificaron la duración concreta de su contrato, mientras que la llegada de un nuevo suministrador de motores parece que retendrá a Alonso al menos dos temporadas (una con opción a otra) en el Mundial de Fórmula 1, buscando despedir su carrera deportiva cómo se merece.
En el caso de Renault es la que a buen seguro sale ganando de todo este movimiento. Los franceses no sólo cuentan con el talentoso ganador de las 24 Horas de Le Mans, Nico Hülkenberg, sino que también están en disposición de hacerse con un Carlos Sainz que se ha revalorizado durante los últimos meses. De concretarse, el apellido Sainz estará de nuevo ligado al del fabricante, como ya ocurrió en los primeros pasos de su padre en el mundo de los rallyes.
A falta de saber si Red Bull Racing se guarda una opción de ‘recompra sobre él, el puesto del madrileño deberá ser ocupado por Pierre Gasly, mientras que la posición de Daniil Kvyat está aún más en entredicho tras una temporada 2017 nefasta para los intereses del ruso. Tanto es así, que muchos han empezado a hablar de que Matsushita podría beneficiarse del nuevo acuerdo con Honda después de que sus opciones con Sauber se desvanecieran junto a la opción de que los de Hinwil colocasen la unidad de potencia de los nipones y la transmisión de McLaren. Sin embargo, en los mentideros del paddock siguen situando a Kvyat en 2018 dentro de Toro Rosso, una estabilidad necesaria especialmente con tantos cambios dentro del equipo.
En lo que respecta al resto de la clase media, Williams parece que continuará con Lance Stroll, respaldado por dos grandes actuaciones y el apoyo económico que siempre acompaña al canadiense, mientras que en el segundo asiento sigue habiendo muchas dudas. Parece claro que esta vez sí estamos ante el último año de Felipe Massa. Con Renault prácticamente cerrada, muchos insisten en la opción de Robert Kubica para la escudería británica, algo que sigue generando dudas en torno a las capacidades físicas del polaco. Sea como fuere, Adam Cooper apunta a que una de las cláusulas del contrato de patrocinio de Martini Racing con Williams es precisamente que uno de los pilotos debe ser mayor de 25 años, por lo que se acotaría bastante el mercado y excluiría jóvenes pilotos como Ocon o el propio Antonio Giovinazzi.
Force India cuenta quizás con una de las mejores alineaciones de la mitad del pelotón, sin embargo, el clima de intranquilidad que vive debido a los roces entre Sergio Pérez y Esteban Ocon en pista hace que no sea de extrañar que cualquiera de los dos pilotos pueda abandonar la escudería a final de año. En el caso del mexicano, sonó también como opción de Renault, pero con la llegada de Sainz a Enstone puede verse obligado a asegurarse un año más con la formación de Vijay Mallya. Seguir una temporada más con los dos pilotos actuales parece posible, siempre y cuando el clima de tensión se mantenga en cotas admisibles y que no pongan en riesgo los intereses de la escudería.
En cuanto a HAAS, se espera un año más de estabilidad, con Romain Grosjean y Kevin Magnussen reteniendo sus asientos ante la imposibilidad de destinos mejores. En Sauber, los rumores hace unos meses hablaban de la opción de que tanto Giovinazzi como Charles Leclerc terminarán conformando una especie de equipo junior de Ferrari con los suizos, aprovechando además el acuerdo para seguir suministrándoles motores. Sin embargo, cobra fuerza la opción de que Marcus Ericsson siga un año más, algo que dejaría sin hueco a uno de los dos pilotos de los italianos. Como siempre, cualquier cosa parecida a la realidad será pura casualidad en la silly season de la Fórmula 1.