El reasfaltado de los circuitos de carreras es un proceso esencial que deben llevar a cabo, en gran medida por el desgaste del pavimento después de un duro calendario de competiciones. Cuanto más ocupado esté el circuito, más vital se hace su reasfaltado y su reencuentro con la bondad del agarre al máximo nivel. No es esa confianza la que se ha dado en Silverstone, dónde un polémico reasfaltado realizado en 2018 dejó el trazado adecuado para las competiciones automovilísticas pero no para las motociclísticas después del paso de distintos campeonatos.
Silverstone efectuó la renovación de su asfalto entre enero y febrero del pasado año, en lo que parecía una tarea no demasiado complicada. Distintos campeonatos locales, la Ferrari Challenge, la Blancpain GT Series y el Mundial de Rallycross pasaron por el trazado inglés sin problemas pero todo se complicó con la disputa del Gran Premio de Fórmula 1. Durante el GP algunos pilotos como Carlos Sainz consideraron que los baches no se habían reducido sino que habían aumentado, llegando Lewis Hamilton a calificarlo como «la peor obra de reasfaltado que he visto». Otros como Fernando Alonso y Max Verstappen restaron importancia a la obra, creyendo Alonso que había baches pero no tantos como en temporadas precedentes.
Todo el trabajo realizado se vino abajo un mes y medio después, con la llegada de MotoGP. Los baches que levantaron los F1 y los coches del WEC empeoraron una situación insostenible y la carrera británica del Mundial de Motociclismo acabó siendo cancelada por la falta de agarre en pista mojada. El campeonato británico de Superbikes usó la versión corta del circuito un par de semanas más tarde y finalmente los responsables del trazado usarán la temporada invernal por segundo año consecutivo para realizar una tarea que debería cumplirse con el éxito esperado.
En Silverstone ya han recibido el reembolso que los aficionados pidieron al no disputarse la carrera de MotoGP, aunque todavía no se sabe quien será el encargado de pagar el nuevo reasfaltado ya que no ha finalizado la investigación sobre la cancelación del evento. «Estamos más cerca del final que del principio de la investigación, esperamos poder empezar las obras cuanto antes y tener el asfalto listo antes del GP de este año», declara Stuart Pringle, director de operaciones de Silverstone. Se espera que la empresa Aggregate Industries no se encargue de la nueva operación después del error de 2018, a pesar de ser los encargados del reasfaltado anterior de 1996.
