Cuando Roger Penske lanza un proyecto no va de farol. Por eso había que estar bien atentos a la iniciativa lanzada por la IndyCar para aumentar la diversidad de su campeonato el pasado verano. Ya se dio a conocer su apoyo a un equipo de categorías inferiores denominado Force Indy para abrir la puerta a los afroamericanos y hoy se ha anunciado que Simona de Silvestro volverá a disputar las 500 Millas de Indianápolis con una estructura de amplia presencia femenina apoyada por el Team Penske.
El proyecto parece beber del fallido intento de Grace Autosport por alinear un equipo totalmente femenino en 2016, en aquella ocasión con Katherine Legge. Beth Paretta, su cabeza visible, descolgó el teléfono al conocer los intentos de Roger Penske por ampliar su audiencia con el programa Race for Equality & Change. Y así es como nace Paretta Autosport, que contará con asistencia técnica del equipo más laureado de la historia de Indianápolis y un nutrido grupo de mujeres ocupando diferentes puestos dentro de su estructura.
Simona de Silvestro regresa de este modo a Estados Unidos después de abandonar las IndyCar Series para competir en los Supercars australianos y posteriormente fichar por Porsche como piloto de fábrica, disputando certámenes de GT3 como el ADAC GT Masters y colaborando en labores de simulador con su equipo de Fórmula E. Su presencia permitirá igualmente volver a ver una mujer en la parrilla de las 500 Millas de Indianápolis después de la llamativa ausencia en la edición de 2020. Y lo mejor de todo es que aparentemente lo hará con material de primer nivel.
