Sabedores de que STARD ha estado tradicionalmente ligada al Ford Fiesta ST como base para sus Supercars de RallyCross, parecía claro que el Projekt E iba a elegir la misma plataforma para mostrarse al público por primera vez a pesar de que la firma del ovalo todavía no cuente con una versión 100% eléctrica de su utilitario más icónico. Aprovechando que este fin de semana se disputa la penúltima cita del World RX 2019 en Riga, el equipo de Manfred Stohl ha mostrado precisamente el vehículo alimentado con baterías que promete 450 kW de potencia (más de 620 CV) y un par de 1.100 Nm con una velocidad punta de 240 km/h.
Colores violetas para presentar el STARD Ford Fiesta ELECTRX, el cual es el heredero de todo el trabajo realizado durante los últimos años por STARD con el Hiper Mk1 que utilizaba como base el Peugeot 207 S2000. Concretamente empleará un tren motriz que propulsará los dos ejes, con un diferencial de deslizamiento limitado integrado y un kit que podrá ser adaptado a cualquier vehículo perteneciente al Segmento B, incluidos los próximos todocaminos eléctricos. El paquete está compuesto por los motores eléctricos, los sistemas de control, la transmisión, el RESS (Rechargable Energy Storage System), el pack de electrónica, el cableado y el sistema de recarga, estando instalado en el caso de STARD en el chasis que utiliza actualmente Janis Baumanis en el World RX.
El objetivo obviamente es que igualen el rendimiento de los Supercars con motores turbo de 2.0 litros que actualmente compiten por las primeras posiciones del World RX. Y es que el objetivo será precisamente que ambas tecnologías de propulsión, eléctrico y con motores de combustión, compitan frente a frente en el futuro, haciendo a los vehículos alimentados con baterías incluso más atractivos por costes (el precio es de unos 194.000 euros el kit) y rendimiento respecto a los que utilizan combustibles fósiles.
Una de las noticias más importantes reveladas es que además habrá la opción de que se adapten los motores de calle a este nuevo tren motriz, por lo que se le abre la puerta de forma velada a los fabricantes que quieran presumir de la eficiencia de sus propulsores eléctricos. No será de extrañar que después de fallar la creación del E-WRX por la desbandada de los fabricantes, nos encontremos con que los equipos se ven forzados a mudarse a lo eléctrico porque estos llegan con un rendimiento desproporcionadamente alto respecto a los de combustión tal y como terminó ocurriendo en el Trofeo Andros.
El plan es demostrar, enseñar y probar lo que se puede hacer con los trenes motrices EV en Rallycross a lo largo de 2020. El proyecto E será solo el comienzo de un futuro eléctrico más amplio y a largo plazo de Rallycross que, por supuesto, nuestro objetivo es influir. aún más con nuestro Ford Fiesta ELECTRX, que lo que hemos hecho con nuestro primer auto RX totalmente eléctrico en 2016.
El Titans RX seguirá siendo térmico y más ecológico:
Max Pucher y el Titans RX siguen por tanto realizando una apuesta muy distinta. Mientas que el Mundial de RallyCross espera regresar a pistas como Montalegre o Estering en 2020 con una especie de ‘back to basics’ después de los últimos años de excesos, la nueva serie creada por los austriacos ha anunciado que su intención sigue siendo la de mantenerse ajeno a la electrificación, garantizando a pilotos y aficionados el sonido de los motores de combustión interna.
Es por ello que su gran iniciativa ecológica para la próxima temporada implicará la llegada de un nuevo combustible sintético al campeonato del Titans RX. Bautizando a la iniciativa como “Real-E», Pucher propone un nuevo carburante creado en colaboración con el preparador Pipo Moteurs que reduce el CO2 fósil y las emisiones de partículas en un 90%, además de proporcionar a los motores más potencia y mejor enfriamiento