Desde que Alexander Rossi compitió en cinco grandes premios de la temporada 2015 con la escudería Manor Marussia, ningún otro piloto estadounidense ha llegado a la Fórmula 1, a pesar de que Liberty Media tiene los derechos comerciales, Haas F1 es una de las escuderías, en el calendario está la carrera a disputarse en el Circuito de Las Américas y el año que viene también se competirá en Miami. Con tantas inversiones norteamericanas involucradas en la categoría resulta un tanto inexplicable que no exista mucho interés en darle un volante a un piloto de los Estados Unidos. Al respecto, Stefano Domenicali, director ejecutivo de la Fórmula 1, tiene sus razones para creer que al menos a mediano plazo ningún otro piloto continuará el camino trazado por Rossi.
Según Domenicali, la presencia de un piloto estadounidense en la parrilla de la Fórmula 1 sería muy positiva para la organización, pero observa que en la Fórmula 2 no hay ningún piloto prometedor de tal nacionalidad, en tanto en la Fórmula 3 están Jak Crawford, Kaylen Frederick, Logan Sargeant y Juan Manuel Correa. No obstante, el mayor movimiento en aquellos predios para imponer a un piloto gira en torno a Colton Herta, quien tuvo una destacada actuación en la Fórmula 3 en el año 2016 pero posteriormente no pudo establecerse en Europa por falta de recursos económicos, por lo que decidió incursionar en la Indy Lights y luego en la IndyCar con éxito en ambas series.
Recientemente Mario Andretti arremetió contra la FIA por el sistema de puntos para aspirar a una superlicencia porque prácticamente se limita a categorías europeas donde se privilegia el dinero por encima del talento, refiriéndose al caso de Herta, quien a sus 21 años ha demostrado poseer más virtudes que Nikita Mazepin, piloto ruso que llegó a la Fórmula 1 sin ganar título alguno en series de formación. En este caso Domenicali no cree en la opción de Herta y supone que a los pilotos norteamericanos en la Fórmula 3, de ser buenos, les tomará al menos unos tres años en llegar a la Fórmula 1 lo que convierte ese camino en una incertidumbre.
Añadió que la posibilidad de ver a pilotos estadounidenses en la Fórmula 1 depende mucho de los programas de las escuderías ya que si no están afiliados a uno el camino para llegar es muy cuesta arriba. Desde su posición intenta mediar con los equipos para ver si existe interés en conceder oportunidad a una joven promesa norteamericana, pero obviamente no toma decisiones a esos niveles.
En palabras de Stefano Domenicali:
Trabajamos para saber cuál es la posibilidad de que los pilotos estadounidenses llamen la atención de los equipos de Fórmula 1 a corto plazo. Siendo muy pragmático o realista, tal vez suceda en los próximos dos o tres años. Mucha gente quiere ver pilotos estadounidenses en el campeonato de Fórmula 1.
Vía | RACER