Las European Le Mans Series estuvieron de vuelta este fin de semana en el circuito de Paul Ricard, evento que sustituía las 4 horas de Barcelona, canceladas por la situación del Coronavirus. Filipe Albuquerque demostró en la clasificación que es el piloto de moda en la categoría, logrando su tercera pole en tres carreras esta temporada. Con una clasificación afectada por la lluvia, el piloto portugués superó por tan solo 10 milésimas al dos veces campeón de la Fórmula E, Jean-Eric Vergne, presagiando ya de nuevo un duelo entre United Autosports y G-Drive en una carrera que comenzaría de día y acabaría de noche.
La lluvia también estuvo presente el día de la carrera, obligando a comenzarla detrás del coche de seguridad. Los equipos fueron cambiando a neumáticos intermedios durante la primera hora de carrera y el orden en la tabla de clasificación cambiaba constantemente. G-Drive se situó en cabeza con un buen ritmo de Mikkel Jensen, mientras que Phil Hanson realizaba una estrategia cambiada con el United Autosports entrando más tarde, lo que les relegó hasta la novena posición. Nico Jamin colocó el Panis Racing #31 en cabeza y se escapó, hasta que un safety car por un espectacular accidente de Loïc Duval volvió a juntar a todo el grupo.
Fue necesario hacer una última parada en los compases finales para repostar, en la cual el equipo United Autosports aprovechó para montar un neumático delantero izquierdo nuevo. Albuquerque salió de boxes a 9 segundos de Vergne pero esa ventaja le hizo recortar esa distancia y superar al francés a falta de menos de cuatro minutos para el final, consiguiendo junto a Hanson su segunda victoria consecutiva y extendiendo su liderato. G-Drive acabó en segunda posición con el Graff #39 de Thomas Laurent, Alexandre Cougnaud y James Allen. Las victorias en LMP3 y en GTE fueron para el equipo Realteam Racing #8 y para el Spirit of Race #55 respectivamente.
Audi gana en la carrera preparatoria de las 24 horas de Nürburgring
La lista de inscritos para la única carrera de 6 horas de la NLS aumentó considerablemente con respecto a las cuatro rondas anteriores, con la mayoría de equipos con la mirada puesta en las próximas 24 horas de Nürburgring. Audi consiguió su primera victoria en la categoría desde 2017 y se postula como uno de los favoritos para conseguir el triunfo en la carrera de resistencia que se disputará los días 26 y 27 de septiembre. Ferrari volvió a sorprender con un gran ritmo de Björn Grossmann y Luca Ludwig, que optando por una parada temprana se colocaron en cabeza de carrera. Junto a los Audi, el Mercedes de HRT con Maro Engel también peleó la primera posición en los compases iniciales.
Pero esa detención les hizo tener que ahorrar gasolina para poder llegar hasta el final sin necesidad de volver a entrar, ocasión que aprovecharon Christopher Mies (Audi #29) y Mirko Bortolotti (Audi #32) para apretar en las últimas vueltas. El piloto alemán tomó el liderato de la carrera en la última vuelta llegando a la primera curva, mientras que el italiano superó a Ludwig en Schwedenkreuz. Mies se hizo con la victoria junto a Mattia Drudi y a Kelvin van der Linde mientras que Bortolotti fue segundo compartiendo coche con Robin Frijns, Christopher Haase y Markus Winkelhock. Los BMW y los Porsche demostraron también un buen ritmo en determinados compases de la carrera, con pilotos como David Pittard y Kevin Estre realizando vueltas muy rápidas.
